La confianza en la economía alemana ha vuelto a mejorar en febrero. El índice de clima empresarial IFO se situó en 91,1 puntos en enero, frente a los 90,1 puntos de diciembre (revisado a la baja desde 90,2), aunque unas décimas ligeramente por debajo de las expectativas del consenso. Según IFO, este dato se debe a unas expectativas "más optimistas" (mejoran hasta 88,5 desde 86,4). Con todo, las empresas siguen mostrándose algo desconfiadas con su situación actual, ya que la referencia cae hasta 93,9 puntos desde los 94,1 anteriores y los 95 esperados por el consenso.
“En una línea: el dato sigue siendo coherente con una recesión alemana poco profunda. Salvo que se produzcan revisiones de los datos del PIB del cuarto trimestre, Alemania no evitará entrar en esa situación”, explican desde Pantheon Macroeconomics.
En el sector manufacturero, el índice prosiguió su trayectoria ascendente, repuntando hasta 1,5 desde los -0,7 puntos anteriores. Esta referencia se encuentra ahora en su nivel más alto en nueve meses y por encima del índice de servicios, que hasta el mes pasado era el único índice por encima de cero. “Esto se debió a la notable mejora de las expectativas de las empresas. Los fabricantes evaluaron su negocio actual un poco peor. Recibieron menos pedidos nuevos”, explican desde IFO.
En cuanto al sector servicios, el clima empresarial mejoró por quinto mes consecutivo y repuntó hasta los 1,3 puntos desde los 0,2 anteriores. Los proveedores de servicios se mostraron algo más satisfechos con su situación empresarial actual. Además, su confianza en los próximos meses siguió aumentando. La confianza mejoró especialmente en la hostelería y el turismo.
En el comercio, el índice volvió a subir: casi unos 5 puntos, de -15,4 a -10,6. En particular, las expectativas eran menos escépticas. Las empresas también se mostraron más satisfechas con su situación actual. Mayoristas y minoristas están superando el desplome del sentimiento del año pasado.
Por su parte, en la construcción, el clima empresarial mejoró ligeramente hasta los -19,6 puntos desde los -21,7. Las empresas están más satisfechas con su situación actual. Sin embargo, sus expectativas siguen marcadas por un pesimismo significativo.
“Es una buena noticia ya que mejora pero no de manera excesiva, lo que podría desencadenar un tono más duro por parte del BCE. Esta tendencia apoya una mejora de expectativas de PIB 2023 para Alemania. Esto se refleja en una revisión al alza de previsiones. Un ejemplo es la Comisión Europea. Revisó su estimación de PIB 2023 para Alemania hasta +0,2% desde -0,6%. El director del IFO apunta que la economía alemana está saliendo gradualmente de un periodo de debilidad”, explican los analistas de Bankinter.
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