A tan sólo cinco días de que entre en vigor la enésima ronda arancelaria sobre las exportaciones chinas a EEUU, ambos países prosiguen sus conversaciones comerciales. Como gesto de buena voluntad, ha trascendido que el gigante asiático ha incrementado la compra de soja, dando respuesta a uno de los escollos del llamado acuerdo de ‘fase uno’ que es, precisamente, el incremento de las importaciones de este cultivo.
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Las bolsas tiemblan ante los aranceles del 15 de diciembre: "Trump puede ser el Grinch"Entre septiembre y noviembre de este año, las importaciones chinas de la semilla leguminosa estadounidense aumentaron 13 veces respecto al mismo período del año pasado, según Xiaoping Zhang, Director Regional de la Gran China para el Consejo de Exportación de Soja de Estados Unidos. Eso se basa en el análisis de datos chinos y estadounidenses.
Las ventas de soja de Estados Unidos a China se redujeron drásticamente en la segunda mitad del año pasado después de que Pekín tomara represalias a los aranceles estadounidenses. Como resultado, todas las compras chinas de soja estadounidense este año se produjeron a través de acuerdos específicos, fuera de los canales comerciales normales, con el objetivo de evitar los aranceles de represalia de alrededor del 30%, dijo Zhang en una entrevista telefónica a la CNBC.
Esa tendencia se hizo pública el viernes, cuando el Ministerio de Finanzas de China dijo en su sitio web que las empresas chinas "importan independientemente" ciertas cantidades de productos estadounidenses y que el gobierno está trabajando en la exención de aranceles para algunos productos de soya, cerdo y otras materias primas estadounidenses.
Estas exenciones arancelarias surgieron en respuesta a las solicitudes individuales de varias empresas para las importaciones de soja y carne de cerdo con origen en Estados Unidos, tal y como informó el Ministerio en un comunicado recogido por Reuters. No obstante, no se especificaron las cantidades afectadas por la exención.
China impuso aranceles del 25% tanto a la soja como a la carne de cerdo de Estados Unidos en julio de 2018, en respuesta a los aranceles impuestos por Washington bajo la acusación de que China roba y obliga a la transferencia de la propiedad intelectual estadounidense a empresas chinas.
DISCREPANCIAS SOBRE COMPRAS AGRÍCOLAS
Por otra parte, también ha trascendido que ambos países todavía están en desacuerdo sobre el tamaño de las compras de productos agrícolas que debe hacer el gigante asiático.
El presidente Donald Trump ha pedido a China que compre entre 40.000 y 50.000 millones de dólares de bienes agrícolas al año, lo que es mucho más que los 8.600 millones de dólares que el país compró el año pasado, señala WSJ citando a personas familiarizadas con las negociaciones. La administración de EEUU también exige que China anuncie públicamente sus planes de compra y que diga que no dependerán de las condiciones del mercado ni de las obligaciones comerciales.