La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) anuncian que rompen la interlocución con el Ministerio de Trabajo hasta que no rectifique una enmienda introducida a la Ley de Empleo que devuelve el control al Ministerio de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE). Consideran que esta enmienda "es una traición al acuerdo alcanzado en la reforma laboral".
Así lo expresan en un comunicado en el que ambas organizaciones añaden que "la actuación del Ministerio a través de la enmienda de EH Bildu supone una ruptura de la buena fe negocial, imprescindible en todo proceso de negociación, que obliga a las partes a respetar y defender los acuerdos alcanzados, actuación que invalida al Ministerio de Trabajo como interlocutor fiable".
Y advierten también que esta modificación, que según dicen tiene como fin intervenir las decisiones empresariales, "es contraria a la Constitución y al derecho a la libertad de empresa y contraviene la normativa europea, que no admite una regulación que sustraiga al empresario la facultad decisoria como establecen numerosas sentencias, entre otras, la sentencia del TJUE de fecha 21 de diciembre de 2016".
Por ello, CEOE y Cepyme, a la espera de una rectificación, han decidido rechazar la interlocución con el Ministerio de Trabajo "por entenderla tramposa y contraria a la buena fe".
En la Junta Directiva de CEOE del próximo 21 de diciembre, estas cuestiones serán tratadas a nivel interno.
La respuesta por parte de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, no se ha hecho esperar. "¿Cuál es el problema en que actúe la Inspección en el examen de las causas que motivan los despidos colectivos si todo se hace bien?", se ha preguntado en declaraciones a la prensa.
Cree que la reacción de los empresarios se debe "a otros motivos y no exactamente a lo que se ha aprobado en la Ley de Empleo", ya que, como ha destacado, lo aprobado se hizo hace más de un año. Además, ha asegurado que "no es verdad" que este asunto se tratara en la reforma laboral. "Jamás", ha remarcado. La ministra ha dicho estar "segura" de que los agentes sociales "van a seguir dialogando y trabajando por su país".
