Limitar el aumento del gasto público primario al 2,6% como máximo en 2024 para lograr recortar el déficit estructural del 0,7%. Es la recomendación que la Comisión Europea ha enviado a España, en un informe en el que el Ejecutivo comunitario solicita poner fin de manera gradual a las medidas de apoyo por los altos precios de la energía.
"Teniendo en cuenta las consideraciones de sostenibilidad fiscal y la necesidad de reducir el déficit por debajo del valor de referencia del 3% del PIB, sería adecuada una mejora del déficit estructural de al menos el 0,7% del PIB para 2024", es decir, el equivalente a 9.289 millones de euros, señala el texto.
La Comisión Europea estima que el déficit de las administraciones públicas vaya cayendo de forma gradual hasta el 2,7% y el 2,5% del PIB en 2025 y 2026, respectivamente. La ratio de deuda, por su parte, bajaría al 106,8% a finales de 2026 desde el 109,1% del PIB a finales de 2024.
Desde Bruselas también se ha instado a España a que las ayudas destinadas a hacer frente a la crisis energética vaya desapareciendo, con el objetivo de que dejen de aplicarse totalmente al cierre de 2023.
Por otro lado, en cuanto a las ayudas procedentes de fondo de recuperación, la Comisión Europea desea que nuestro país mantenga su política de inversión pública. Además, aconseja al Gobierno de Pedro Sánchez que presentar pronto la actualización del plan español de recuperación para poder acceder a la asignación que le corresponde de otros 10.000 millones de euros en ayudas directas y 84.000 millones en créditos.