La vicepresidenta de la Reserva Federal, Lael Brainard, ha señalado este miércoles que la tasa de política monetaria tendrá que aumentar aún más. "La política monetaria tendrá que ser restrictiva durante algún tiempo para dar confianza en que la inflación se está moviendo hacia la meta".
Brainard ha indicado que el entorno económico es muy incierto y que la trayectoria política dependerá de los datos. Si bien las acciones que se llevan a cabo desde la Fed dependerán de la evolución de las perspectivas, confía en regresar la inflación al objetivo del 2%. "Nuestra determinación es firme, nuestros objetivos son claros y nuestras herramientas están a la altura de la tarea".
La vicepresidenta de la Fed ha subrayado que puede llevar tiempo que el efecto del endurecimiento monetario se abra camino a través de la economía, pero que estarán en esto "todo el tiempo que sea necesario para bajar la inflación".
"El proceso desinflacionario aquí en EEUU debería verse reforzado por una demanda más débil y un endurecimiento en muchos otros países. Este es particularmente el caso cuando Europa lidia con riesgos a la baja para la actividad y una grave escasez de energía causada por la guerra de Rusia contra Ucrania, y mientras China mantiene su enfoque cero COVID en un contexto de consumo más débil", ha dicho.
Asimismo, aunque ha reconocido no tener el control sobre los choques de suministro de alimentos, energía, mano de obra o semiconductores, "sí tenemos la capacidad y la responsabilidad de mantener las expectativas de inflación ancladas y la estabilidad de precios". Igualmente ha advertido del riesgo de retroceder demasiado pronto apelando a la historia.
Brainard ha agregado que la inflación ha sido muy alta tanto en Estados Unidos como en todo el mundo y que los hogares con bajos ingresos se están viendo especialmente afectados. Además, las múltiples olas de la pandemia, combinadas con la guerra de Ucrania, han desencadenado una serie de choques de oferta que han afectado a bienes, mano de obra y productos básicos que, en combinación con una fuerte demanda, han contribuido a la alta inflación.
"Con una serie de choques inflacionarios de oferta, es especialmente importante protegerse contra el riesgo de que los hogares y las empresas comiencen a esperar que la inflación se mantenga por encima del 2% a largo plazo, lo que haría mucho más difícil reducir la inflación a nuestro objetivo. La Reserva Federal está tomando medidas para mantener ancladas las expectativas de inflación y llevar la inflación de vuelta al 2% con el tiempo".
Durante su discurso, la banquera central ha repasado los últimos datos económicos conocidos en EEUU, y ha dado la bienvenida a la moderación de la inflación, aunque ha indicado que "será necesario ver varios meses de lecturas de inflación mensuales bajas para estar seguros de que la inflación está volviendo a bajar al 2%".
En cuanto al mercado laboral, también ha destacado como una señal positiva los datos de agosto, pero que "es demasiado pronto para sacar conclusiones definitivas, y seguiré de cerca una variedad de indicadores del mercado laboral", ha concluido.
MESTER NO ESTÁ CONVENCIDA DE QUE LA INFLACIÓN HAYA TOCADO TECHO
La presidenta del Banco de la Reserva Federal de Cleveland, Loretta Mester, también se ha pronunciado este miércoles y ha señalado que no está convencida de que la inflación en Estados Unidos haya tocado techo.
Durante una transmisión web con Market News International, la banquera central ha apuntado que el alto precio de los alquileres en Estados Unidos todavía no se ha reflejado por completo en las medidas de inflación, lo que sugiere el coste de la vida podría aumentar más.
"Eso tiende a ser mucho más persistente y los alquileres aún son muy elevados. Los alquileres tardan un tiempo en aparecer en la inflación subyacente. Todavía hay más que aparecerán en ese lado... No he visto mucho en la manera de sugerir que está empezando a bajar", ha afirmado.
Con respecto a la próxima reunión de septiembre de la Reserva Federal y cuan elevada será la subida de los tipos de interés ha indicado que decidirá el tamaño en “la propia reunión”.
Asimismo, ha reiterado que todo dependerá de los datos económicos que se hayan conocido hasta ese momento. "La política debe guiarse por los datos entrantes, ya que informan de las perspectivas".
En cuanto a los inversores, les ha advertido de que "es mejor que los mercados se centren en la trayectoria de los tipos de interés que en una reunión concreta".
Mester también ha hecho referencia a que el reto de la Fed es desacelerar la actividad económica “sin provocar una recesión”.