Las ayudas que recibirá España de la Unión Europea "no van a ser un cheque en blanco", ha explicado el exministro de Asuntos Exteriores y actual vicepresidente de la Comisión Europea, Josep Borrell. Aunque ha añadido que la condicionalidad no será "la de los hombres de negro y las famosas troikas que intentaban garantizar los ajustes macro severos".
Noticia relacionada
La cumbre de la UE acaba sin acuerdo sobre el fondo de rescate para España e ItaliaEn una comparecencia en la Comisión para la Reconstrucción Económica y Social del Congreso, ha dicho que "es evidente" que las ayudas tendrán una "condicionalidad orientada a un fin", como destinar los fondos a la digitalización y la transición ecológica, las cadenas de valor y la autonomía estratégica de la UE.
El objetivo, segun Borrell, es "recapitalizar la economía para hacerla más resistente" y generar un "círculo virtuoso". Aunque también ha comentado que "nada es gratis" y que los fondos se devolverán.
LA CUMBRE CLAVE SERÁ EN JULIO
Julio, esa es la nueva fecha elegida por los jefes de Estado de la Unión Europea para seguir con las negociaciones. Los Veintisiete no consiguieron llegar a un acuerdo el pasado viernes sobre el plan de recuperación económica tras la pandemia, por lo que están abocados a seguir con las negociaciones.
"Saludo la disposición a comprometerse. Estoy totalmente comprometido a comenzar inmediatamente las auténticas negociaciones con los Estados miembros y espero tener una cumbre física en torno a mediados de julio en Bruselas", explicó el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
Para Michel la reunión del viernes sirvió para "observar que hay un consenso emergente, lo que es muy positivo", aunque hizo un llamamiento a la calma e instó a "no infravalorar las dificultades", puesto que hay diferentes puntos de vista en ciertos temas. Son estos conflictos los que pospusieron la negociación al mes de julio.
Noticia relacionada
Lagarde alerta de nuevo a los líderes de la UE: "Lo peor está por llegar"Menos optimista se mostró Christine Lagarde, presidenta del BCE, que alertó a los líderes europeos de que "lo peor está por llegar". Es por esto que les instó a "evitar" el fracaso en las negociaciones sobre el fondo de reconstrucción.
Si no consiguen llegar a un punto en común, Lagarde cree que se podría producir un cambio en la confianza generada por las medidas de estímulos tomadas hasta el momento.
De aprobarse el fondo, España e Italia serían dos de los países más beneficiados .Es por esto que Pedro Sánchez pide que el acuerdo que se alcance sea ambicioso y esté "a la altura de una crisis sin precedentes".
A pesar de que todavía queda mucho camino que recorrer, desde el Ejecutivo se han pronunciado de una manera muy similar a la de Michel. Creen que el encuentro del viernes "es un punto de partida para iniciar la negociación que debe comenzar lo antes posible con el objetivo de lograr un acuerdo durante el próximo mes de julio".