El presidente Joe Biden centra todos los focos ahora en Estados Unidos, ya que su actuación en el primer debate presidencial frente a Donald Trump ha disparado las alarmas sobre su situación y sobre un posible abandono de la carrera a la Casa Blanca. Mientras, el líder demócrata no aclara su futuro, y la mayoría de analistas no lo incluyen como favorito en sus apuestas, aunque otros se preguntan cómo sería un segundo mandato suyo.
Los analistas de Oxford Economics destacan que "una victoria demócrata en las elecciones presidenciales y del Congreso de 2024 significaría cambios importantes en los programas de beneficios sociales y la política fiscal".
En materia de precios, aseguran que "la inflación sería moderadamente más alta durante un segundo mandato de Joe Biden, pero a más largo plazo, las políticas promulgadas no conducirían a una inflación más rápida".
Mientras, el principal objetivo de una agenda demócrata "serían políticas dirigidas a la familia que reduzcan el costo del cuidado infantil y promuevan una mayor participación de los padres en el mercado laboral, particularmente entre las madres".
En la firma estiman que un programa de cuidado infantil gratuito o de bajo costo aumentaría la tasa de participación en la fuerza laboral en 0,6 puntos porcentuales.
"A largo plazo, el conjunto de políticas de apoyo a las familias aumentaría el nivel del PIB real sin avivar una mayor inflación. En lugar de llevar la economía más allá de su capacidad, la mayor tasa de participación de la fuerza laboral que resulta de estas políticas para la primera infancia permitiría una economía que puede producir más bienes y servicios de los que produciría de otra manera", valoran.
El escenario base que construyen en la firma para un posible segundo mandato de Biden incorpora "un amplio paquete de inversión en beneficios sociales, pagado sólo parcialmente por mayores impuestos corporativos".
"También construimos un segundo escenario de 'Biden en toda regla', en el que los demócratas promulgan mayores aumentos de impuestos de modo que su legislación sea neutral en materia de déficit durante los próximos 10 años. En este escenario, la economía aún termina siendo más grande a pesar de una mayor carga fiscal", matizan.
PELIGRO FISCAL
Una de las principales dudas que surgen en torno a un posible segundo mandato de Biden es el estado de las cuentas públicas, ya que, como apuntan desde Danske Bank, "dadas las políticas actuales, la ya grande deuda federal estadounidense seguirá creciendo y, por tanto, las finanzas públicas no son sostenibles".
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Biden y Trump luchan por ser "el más duro para el comercio" antes de las elecciones"Aunque todavía no es un tema importante en el mercado, parecen existir preocupaciones en aumento y había más interés de lo habitual en torno a las proyecciones presupuestarias presentadas el 18 de junio. El principal riesgo es que los mercados cuestionen si la política monetaria podrá mantener la inflación en el 2% y, por lo tanto, los inversores comenzarán a exigir significativamente primas de riesgo más altas para que los mercados se compensen", detallan.
En este sentido, aseguran que "las próximas elecciones podrían aumentar la atención sobre el problema de las finanzas públicas", aunque no encuentran motivos "para esperar una turbulencia financiera inminente".
"Las finanzas públicas estadounidenses son problemáticas desde hace muchos años y no existen umbrales fijos para las reacciones del mercado. Según las nuevas proyecciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO), el déficit del Gobierno Federal equivaldrá al 7% del PIB este año, disminuirá al 5,5% en 2027 y luego aumentará nuevamente al 6,9% en 2034", pronostican.
¿QUÉ OPINAN LOS MERCADOS?
Caspar Rock, director de inversiones (CIO) en Schroders, recuerda que "las encuestas sitúan a Trump ligeramente por delante, pero dentro del margen de error", por lo que considera que "el resultado aún está en el aire". Además, todavía ve "posible que cambie uno de los candidatos o ambos" antes de que se celebren los comicios.
Sin embargo, los mercados todavía no parecen estar reaccionando a los escenarios más probables de las elecciones, y este analista considera que se debe a que los comicios "aún están demasiado lejos y los planes de los candidatos son todavía demasiado imprecisos".
Tampoco han reaccionado a los problemas judiciales del líder republicano, aunque "esto aún podría cambiar cuando Trump sea sentenciado a mediados de julio".
Con todo, el ganador de las elecciones deberá hacer frente a una serie de problemas en el país, entre los que el analista destaca que "la deuda pública alcanza ya niveles muy elevados, mientras que el envejecimiento de la población supone una carga cada vez mayor para el Estado". También anticipa "decisiones difíciles en torno al cambio climático y la defensa".
"El reto para los políticos será encontrar el equilibrio adecuado entre impuestos, gasto y deuda, manteniendo al mismo tiempo a los mercados y a los votantes de su lado. Inevitablemente, habrá implicaciones para la inversión", concluye.