El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, y otros líderes del Congreso tienen previsto reunirse este martes para discutir las negociaciones presupuestarias para evitar un impago.
Biden dijo a los periodistas este domingo en Delaware que espera reunirse con McCarthy el martes y se mantuvo hermético sobre los términos de la negociación sobre el techo de deuda. Sin embargo, afirmó que cree que se podrá llegar a un acuerdo. "Realmente creo que tanto ellos como nosotros deseamos llegar a un acuerdo y creo que podremos hacerlo", señaló.
Michael Hewson, director de análisis de CMC Markets en Londres, afirma que "aunque los riesgos en torno a esta cuestión están bien ensayados, se podría argumentar que parecen algo exagerados, dada la regularidad con la que hemos visto desarrollarse este escenario en los últimos años, con un 'enjuague y repetición' regular antes de sellar un compromiso tardío".
Añade este experto que, no obstante, la incertidumbre generada por los acontecimientos en Washington está provocando un sesgo más defensivo entre los inversores.
Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank, coincide con Hewson en que el estancamiento del techo de la deuda estadounidense es "un importante lastre para el apetito de los inversores".
"La reunión que debían celebrar Biden y McCarthy el viernes se aplazó a esta semana. Esto último se ha tomado en parte como una señal de que las negociaciones a nivel de personal avanzan, y de que un eventual acuerdo sobre el gasto podría allanar el camino para un acuerdo sobre el techo de deuda", comenta Ozkardeskaya.
Sin embargo, reconoce que nada es seguro, y considera probable que el suspense sobre el techo de la deuda se prolongue hasta el último minuto, "lo que mantendrá cautos a los inversores, que buscarán seguridad en los bonos soberanos estadounidenses a largo plazo y en el oro".
