El Banco de Inglaterra (BoE) ha anunciado que va a llevar a cabo una revisión "única en una generación" de sus pronósticos de inflación después de que el premio Nobel y ex presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, encontrara "deficiencias significativas" en el modelo económico básico del organismo británico.
Bajo su punto de vista, los actuales "gráficos en abanico" del BoE, que muestran las probabilidades de diferentes resultados para el crecimiento y la inflación bajo diversos supuestos, habían "dejado de ser útiles" y "deberían eliminarse". Por ello, aconseja al organismo "reemplazar o, como mínimo, renovar completamente" su modelo económico.
Además, cree que debería confiar en "descripciones más cualitativas de los riesgos y la incertidumbre que rodean las perspectivas". Y considera que el BoE necesita mejorar su comunicación con el público, con lo que le recomienda poner menos énfasis en el pronóstico central, simplificar su declaración de política y reducir la repetitividad.
Por su parte, el BoE ha asegurado que está "comprometido a actuar", pues considera el informe de Bernanke una "oportunidad única en una generación" para actualizar los enfoques de pronóstico y adaptarlos a un "mundo más incierto", según ha expresado el gobernador del BoE, Andrew Bailey.
La vicegobernadora entrante del BoE, Clare Lombardelli, será la encargada de liderar la implementación de estas recomendaciones cuando asuma su cargo en julio.