El gas ha sido, sin duda alguna, el principal actor en la crisis energética de Europa. Los altos precios provocados por las interrupciones del suministro a raíz de la guerra de Ucrania y la alta dependencia de la Unión Europea del suministro ruso han sumido en el caos a los mercados energéticos en los últimos meses. Bruselas ha ido desplegando diversas estrategias para hacer frente a esta circunstancia, con el almacenamiento alcanzado máximos históricos y los precios cayendo sustancialmente en las últimas semanas. El nuevo escenario ha motivado que Berenberg mejore su previsión del PIB comunitario para 2023, al tiempo que celebra que “por fin lleguen buenas noticias”.
Y es que, hasta ahora, la firma alemana había basado sus estimaciones para la eurozona en unos “precios del gas ligeramente superiores a 200 euros/megavatio hora (MWh)”. Sin embargo, este mismo miércoles los futuros europeos de gas natural, que se negocian en la plataforma neerlandesa TTF, cayeron por debajo de los 120 euros/MWh por primera vez desde el mes de junio. De hecho, el precio llegó a caer por debajo de los 110 euros en la apertura antes de estabilizarse en los niveles actuales.
“Sin embargo, el perfil de la curva de futuros, con precios de unos 150 euros/MWh hasta la primavera de 2024, parece ahora menos desafiante para el próximo invierno que a principios de septiembre”, apuntan desde Berenberg. Por ello, remarcan, a no ser que los precios vuelvan a subir, “el dolor que provocará el precio del gas, que todavía se cierne sobre los hogares y las empresas, será probablemente menos grave de lo que esperábamos hace seis semanas”.
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No todo está perdido en Europa: puede haber recuperación en forma de 'V' tras la recesiónCon todo, “con un menor riesgo de escasez de gas y unos precios del gas algo menos elevados, la recesión será probablemente menos profunda”, explican desde el banco teutón. Este pasado martes, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció que las reservas comunitarias habían alcanzado el 92%, aunque ya habían batido hace tiempo el objetivo del 80% estipulado por el bloque comunitario.
“Por países, con el 96% de su capacidad, Alemania, muy expuesta, ha cumplido (y superado) su objetivo del 95% para el 1 de noviembre con más de dos semanas de antelación”, celebran desde Berenberg. En este sentido, esperan que se produzcan “nuevos avances hasta que comience la temporada de frío” y subrayan que “el riesgo de que los países más importantes, como Alemania, agraven la recesión al tener que racionar el gas por decreto este invierno ha disminuido ligeramente”.
Todo ello ha provocado que estos expertos hayan mejorado las previsiones de variación intertrimestral del PIB de la eurozona para los tres próximos trimestres: del -1,0% al -0,9% intertrimestral para el cuarto trimestre de 2022; del -1,0% al -0,8% para el primer trimestre; y del 0,0% al 0,1% intertrimestral para el segundo trimestre de 2023.
Así, la nueva previsión de Berenberg estima una caída del PIB europeo en 2023 del 0,9% en lugar del descenso del 1,2% anterior. Esta estimación, apuntan, se mantiene “muy por debajo del consenso de Bloomberg del -0,1% y de la proyección de los servicios del BCE de septiembre del 0,9% de crecimiento para el próximo año”.
Por otro lado, los expertos de la compañía germana destacan que, con una recesión menos pronunciada en 2023, también se producirá un repunte “ligeramente menos potente en 2024” del 2,3%, en lugar del 2,5% estimado con anterioridad. “Dicho de otro modo, ahora esperamos una forma de 'V' ligeramente más plana”, sentencian.
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La política energética de Europa evidencia y aumenta la ventaja de Estados Unidos“Esperamos que la actividad económica se contraiga significativamente a finales de 2022 y principios de 2023 en la Eurozona y el Reino Unido. En países como Alemania y el Reino Unido, que no se beneficiaron de la sólida temporada turística de verano posterior a la crisis del Covid-19 en las playas del Mediterráneo, la recesión probablemente ya comenzó en el tercer trimestre”, añaden.
Por último, Berenberg destaca que, con la caída de la curva de futuros de los precios, el alivio en las facturas de consumidores y empresas que están proveyendo los distintos gobiernos de la Unión no dejará tanta huella en el déficit fiscal comunitario. “Con unos precios del gas de unos 150 euros por MWh para el próximo año, más o menos en línea con la curva a plazo, recortamos nuestra estimación del déficit fiscal de la Eurozona del 5,4% al 4,8% del PIB en 2023”, señalan.
Asimismo, “debido a los regímenes de subvención, una corrección del precio de mercado del gas se reflejará probablemente más en un menor déficit fiscal que en una recesión más superficial”. Además, la firma germana destaca que la menor necesidad de emitir bonos implica un riesgo a la baja para su previsión de que los rendimientos del ‘bund’ alemán de referencia a 10 años subirá al 2,7% a finales de 2023.
MEDIDAS COMUNITARIAS
Cabe recordar que la Unión Europea ha dado a conocer este martes las últimas medidas comunitarias para hacer frente a la crisis energética. El paquete de propuestas de Bruselas incluye compras conjuntas de gas, un cambio de la referencia utilizada para fijación del precio del gas natural licuado (GNL) y establecer un "límite dinámico" para el mercado TTF.
Noticia relacionada
Bruselas anuncia compras conjuntas de gas, pero desecha los topes a los preciosCon todo, la Comisión sigue estudiando el tope a los precios del gas como el que se aplica en España y Portugal con la llamada ‘excepción ibérica’, una demanda cada vez más recurrente entre los Estados miembros y que todavía provoca fuertes divisiones en el seno de la Unión. Por un lado, 15 países entre los cuales se encuentran Estados tan diversos como Italia, Polonia o Bélgica demandan esta medida, mientras que otro grupo liderado por Alemania y Países Bajos se oponen al tope ya que alegan que dificultará la capacidad de competir en los mercados.
“Aunque se avanza, estamos lejos de poder identificar las soluciones que puedan mantenerse a lo largo del tiempo”, ha criticado la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica española, Teresa Ribera, quien cree que el paquete de medidas queda “muy por debajo de las expectativas que había suscitado el discurso de Von der Leyen”. La propia presidenta de la Comisión, al hablar sobre las anteriores compras conjuntas, aseguraba que “sabemos que somos fuertes cuando actuamos juntos”. ¿Conseguirá poner de acuerdo a dos bloques tan alejados en sus posturas?