El Banco Central Europeo (BCE) celebra su último cónclave bancario del año en el que se verá las caras con la elevada inflación, el avance de los contagios en la zona euro y la presencia de la nueva variante del Covid, Ómicron. Del banco central se esperan tres cosas fundamentalmente este jueves: que anuncie el final del PEPP, que difunda el plan para la relajación de los estímulos y que presente su cuadro macro, con la primera publicación de las perspectivas para 2024.
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"Siempre hay una excusa para la inacción del Banco de Inglaterra", que mantendrá tiposLa mayoría de expertos señalan que el supervisor monetario mantendrá el timón, insistirá en la transitoriedad de la inflación y ofrecerá la guía para navegar la relajación de la expansión cuantitativa, al menos en los dos primeros trimestres de 2022. No obstante, muchos analistas no esconden una nota de advertencia, ya que aventuran que la irrupción de Ómicron podría retrasar las decisiones sobre el futuro del 'QE' (del inglés quiantitative easing) hasta febrero de 2022, "alegando que hay demasiada incertidumbre para actuar en esta reunión de diciembre", comenta François Rimeu, estratega senior de La Française AM.
Las nuevas condiciones de la pandemia y la galopante inflación "han complicado el panorama hasta el punto de que el Consejo de Gobierno puede necesitar más tiempo para decidir todos los detalles del ajuste de su herramienta de política no convencional", agrega por su parte Dirk Schumacher, analista de Natixis.
La institución dirigida por Christine Lagarde desarrolló un programa de compra de bonos 'ad hoc', a raíz de la crisis sanitaria en marzo de 2020, para apoyar a la zona euro. Se espera que el BCE confirme que el PEPP -siglas en inglés del programa de compras de emergencia para la pandemia- termine en marzo de 2022 con una dotación total de 1,85 billones de euros.
El BCE también ha mantenido su programa de compra de activos, conocido como APP, durante la pandemia, que tiene un ritmo mensual actual de 20.000 millones de euros. El banco central se ha valido de este programa en combinación con el PEPP para sostener la economía de los 19 países del euro.
El consenso de analistas cosultados por 'Bolsamanía' espera que el Consejo de Gobierno evite un efecto precipitado en las compras de activos y optará por reducir gradualmente el ritmo de los actuales 90.000 millones de euros al mes. Y difieren moderadamente a la hora de describir el formato que adoptará esta transición. Para Konstantin Veit, gestor de carteras de PIMCO la rebaja se hará "hasta una tasa estable de entre 40.000 y 60.000 millones de euros al mes durante el segundo trimestre del próximo año". Esto podría adoptar la forma de una dotación de transición de entre 200.000 y 300.000 millones de euros durante nueve meses.
Según Rimeu, el APP "debería ampliarse a una media de 40.000 millones de euros mensuales a partir del próximo mes de abril y hasta finales de 2022". "Además, el consejo de gobierno del BCE podría complementar la media mensual de 20.000 millones de euros con una dotación fija y temporal hasta diciembre de 2022, de entre 150.000 y 200.000 millones de euros".
"También pensamos que el BCE mantendrá el marco actual de revisión del ritmo de las compras de activos de forma periódica, con vistas a relegarlas gradualmente de una herramienta de extracción de duración a un puro dispositivo de señalización de los tipos de interés oficiales con el tiempo", añade Veit.
ESTIMACIONES MACRO Y TIPOS DE INTERÉS
Además, el banco central ofrecerá la actualización de las estimaciones de crecimiento e inflación de los próximos años. "El mercado estará especialmente atento al último dato, donde se esperan repuntes IPC para 2021, 2022 y probablemente 2023 respecto a los datos publicados en septiembre, "aunque tanto las proyecciones de 2023 como las nuevas del 2024 se situarían en niveles inferiores al 2%", avisa Germán García Mellado, gestor de renta fija de A&G Banca Privada.
En este sentido, se espera que Lagarde insista en que, aunque los riesgos en materia de inflación han aumentado, todavía esperan que este repunte sea temporal.
El aumento del coste de la vida en la zona del euro alcanzó un máximo histórico del 4,9% en noviembre, mucho más del doble del objetivo simétrico del banco central del 2%. La presidenta del BCE reconocerá que los riesgos al respecto del IPC han aumentado, pero también subrayará que esperan que el repunte sea temporal.
Respecto a los tipos de interés, diferentes miembros del Consejo de Gobierno, entre los que se incluye la presidenta, han repetido en numerosas ocasiones que no contemplan tocar el precio del dinero en 2022, mensajes que se han visto reforzados con la aparición de Ómicron, y las incertidumbres económicas que genera esta última mutación del Covid.
"Por ello, parece que volverán a insistir en este mensaje, posponiendo cualquier decisión en este sentido para más adelante", señala García Mellado.