El Banco de Inglaterra (BoE por sus siglas en inglés) ha cumplido con lo que esperaba el mercado y ha anunciado estímulos adicionales por valor de 100.000 millones de libras, lo que eleva su potencia de fuego a 745.000 millones de libras. La entidad dirigida por Andrew Bailey ha mantenido los tipos de interés en el mínimo histórico del 0,1%.
La entidad espera que el programa de compra de activos se lleve a cabo "a un ritmo más lento" y se complete a finales de año, según se desprende de las actas de la reunión del mes de junio. Así, el documento expone que el Comité de Política Monetaria "juzga que se justifica una mayor relajación de la política monetaria para cumplir con sus objetivos estatutarios", así como de inflación "en el medio plazo".
Ocho miembros del comité de política monetaria del Banco votaron a favor de expandir el programa de compras de activos, mientras que Andy Haldane, el economista jefe del banco central, votó en contra de la medida, muestra el documento.
El banco central también ha señalado que "está preparado" para adoptar acciones adicionales si es necesario, por ello "continuará monitoreando la situación de cerca y, de acuerdo con su misión, está listo para tomar más medidas según sea necesario para apoyar la economía y garantizar un retorno sostenido de la inflación al objetivo del 2%". "El Comité mantendrá el programa de compra de activos bajo revisión", ha señalado el banco central. La entidad ya agregó 200.000 millones de libras a su programa de estímulos en el mes de marzo.