El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha insistido en que en esta segunda fase en la que se ha superado la hibernación y el confinamiento, pero todavía no se ha vuelto la normalidad, hay que mantener medidas de apoyo como los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), los avales públicos del ICO o las ayudas a los colectivos vulnerables pero haciendo que sean eficaces y no generen distorsiones.
Durante su participación este jueves en la presentación del informe del Real Instituto Elcano "Recuperación o metamorfosis", ha explicado que los ERTE deben tener como objetivo recuperar el empleo paralizado y que los avales del ICO deben ir a empresas viables.
"Es necesario que el apoyo del sector público y el impulso fiscal siga vigente y cubra las lagunas del sector privado", ha reiterado, toda vez que a medio plazo apoya que el programa de consolidación fiscal se retrase en su ejecución pero no en su diseño. Hernández de Cos también ve decisivo los fondos de la Unión Europea para la reconstrucción de los países más afectados y ha dicho que el plan de reconstrucción aprobado debe ser "solo el embrión" de un mecanismo permanente de estabilización fiscal europeo.
MERCADO LABORAL
Por otro lado, ha añadido que entre las reformas estructurales pendientes está la del mercado laboral para acabar con la elevada temporalidad. "Cambiar esta dinámica de precariedad y temporalidad debe pasar necesariamente por volver a rediseñar el sistema de contratos para ver los costes de los despidos de fijos y temporales, que están seguro detrás del nivel de temporalidad tan elevado", ha señalado, al tiempo que ha abogado por rediseñar las políticas activas para "emparejar las necesidades de las empresas y de los trabajadores desempleados".
Otra de las reformas que ha apuntado es la de aumentar la productividad de la economía con un mayor tamaño de las empresas y una mejora de su capital humano y tecnológico ya que provocará mejores salarios y empleos de calidad. En este sentido, ha añadido que estas reformas ayudarán a paliar el aumento de la desigualdad social que se ha incrementado con la crisis sanitaria. "Cuanto mayor es la ganancia de productividad de un país, más se incrementan los salarios y el empleo", ha recalcado, tras recordar que los contratos temporales son los que soportan la destrucción de empleo.
Asimismo, ha afirmado que la transición ecológica pasa por una política fiscal que desincentive las actividades contaminantes a través de la imposición así como por un aumento del gasto en inversiones tanto en infraestructuras como en los colectivos que pueden verse perjudicados durante esta transición y que "habrá que compensar para que no genere más desigualdad".
"Muchas de las medidas estructurales como la dinámica de aumentar la productividad o la de reducir la temporalidad son fundamentales también para reducir las desigualdades del país", ha puntualizado Hernández de Cos que, no obstante, ha considerado que el ingreso mínimo vital (IMV) reducirá la pobreza extrema.