El Comité de Política Monetaria y Estabilidad Financiera del Banco de Noruega (Norges Bank) ha decidido por unanimidad este jueves elevar el tipo de interés oficial en 0,25 puntos porcentuales, hasta el 2,75%. El banco central se desmarca de las alzas de 50 puntos básicos que han llevado a cabo la Reserva Federal (Fed) y el Banco Nacional Suizo (SNB) y que se espera que también anuncien hoy el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de Inglaterra (BoE).
"Sobre la base de la evaluación actual del Comité de las perspectivas y el equilibrio de riesgos, lo más probable es que el tipo de interés oficial vuelva a subir en el primer trimestre del próximo año", ha anticipado el organismo.
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El Comité considera que sigue siendo necesario un tipo de interés más alto para frenar la inflación. Los precios al consumo han subido rápidamente y la inflación está muy por encima del objetivo. La actividad de la economía noruega sigue siendo elevada y el desempleo se ha mantenido muy bajo. Al mismo tiempo, la economía se está ralentizando y el aumento de la inflación está reduciendo el poder adquisitivo de los hogares. Una relajación de las presiones económicas contribuirá a frenar la inflación más adelante, ha indicado.
Según el Norges Bank, desde el informe de septiembre, la inflación ha sido más alta de lo previsto y se espera que se mantenga alta durante más tiempo de lo estimado anteriormente. Al mismo tiempo, el mercado laboral parece algo más tenso de lo previsto. Por otra parte, el tipo de interés oficial se ha elevado considerablemente en poco tiempo, y la política monetaria ha empezado a tener un efecto restrictivo sobre la economía. "Hay indicios de que la ralentización puede resultar algo más pronunciada de lo previsto en septiembre", anticipa.
Asimismo, el Banco de Noruega ha dicho que la futura trayectoria del tipo de interés oficial dependerá de la evolución económica.
"Las previsiones para la economía noruega son más inciertas de lo normal, pero si la economía evoluciona según lo estimado, el tipo de interés oficial se situará en torno al 3% el año próximo", ha declarado la gobernadora, Ida Wolden Bache.
Si persisten las presiones sobre la economía y surgen indicios de que la inflación se mantendrá alta durante más tiempo del esperado actualmente, podría ser necesario un tipo de interés más alto. Si la inflación disminuye más rápidamente o el desempleo aumenta más de lo anticipado, el tipo de interés oficial podría ser inferior al previsto, concluye el Norges Bank en su comunicado.
