Ante la previsión de desaceleración del ritmo de crecimiento económico, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha rebajado su proyección del Producto Interior Bruto (PIB) hasta el 1,7% de cara a 2024, lo que supone una revisión a la baja de tres décimas.
Para 2023, calcula que el crecimiento de la economía española será del 2,3%, con un debilitamiento en la segunda parte de año. "El endurecimiento de las condiciones de financiación, el deterioro de la confianza de hogares y empresas y la debilidad del crecimiento económico del área del euro apuntan a una desaceleración del crecimiento en España, que ya se detecta en la información disponible para el tercer trimestre del año", señalan.
No obstante, constata que la economía española ha mostrado mayor resiliencia que el resto de las economías europeas en 2022 y en el período transcurrido de 2023.
Por otro lado, según se recoge en el documento 'Proyectos y Líneas Fundamentales de los Presupuestos para 2024', la AIReF avala la previsión del Gobierno de reducir el déficit de las Administraciones Públicas hasta el 3%, para estabilizarse posteriormente en torno al 3,2% del PIB hasta 2028. Eso sí, se conseguirá con mayores ingresos y mayores gastos de los que prevé actualmente el Ejecutivo y si se retiran las medidas contra la crisis energética y de precios.
A medio plazo, la AIReF estima que el déficit volvería a subir hasta el 3,2% del PIB en 2025 por la retirada de las medidas temporales de incremento de ingresos y se estabilizaría en ese nivel hasta 2028 si no se adoptan medidas adicionales.
Indican que la deuda iniciaría una senda ascendente tras alcanzar un 106% del PIB en 2028. Según la AIReF, esto pone de relieve la necesidad de contar con una estrategia fiscal de medio plazo realista y creíble que sitúe la deuda en una trayectoria descendente a largo plazo.
En cuanto a los precios, se espera que la inflación se mantenga en el 3,9% en 2023 y 2024, mientras que el crecimiento del deflactor del PIB se reduciría desde el 5,8% estimado en 2023 hasta el 3,2%.
"La contención de los precios que cabría esperar a medida que se completa la traslación de los pasados aumentos de costes de producción y los efectos base asociados a los precios de la alimentación en 2024 se verán compensados por la aceleración de los salarios nominales, la desaparición de las medidas implementadas para mitigar los efectos de la inflación sobre la renta de las familias y el aumento reciente de los precios del petróleo", apunta la AIReF.
