La presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán, ha advertido de que el impuesto a la banca tendrá un efecto negativo relevante sobre el crecimiento económico en un momento de incertidumbre geopolítica en el que Europa necesita competir.
En una entrevista al Canal 24 horas recogida por Europa Press, Kindelán ha insistido en que "hablamos de impactos muy grandes, no a los bancos, sino a la capacidad de financiar a familias y empresas de este país".
Por ello, ha pedido que las negociaciones sobre cuestiones "tan importantes" como la reforma fiscal sean "transparentes" y "den confianza y seguridad a los ciudadanos".
A su juicio las desavenencias entre los partidos presentes en el Congreso para votar la reforma fiscal está "muy lejos" de lo que el país necesita.
Kindelán afirma "no tener ni idea" de cuál será finalmente el acuerdo de mañana sobre la reforma fiscal y que puede incluir el mantener el impuesto a la banca, que actualmente está solo vigente hasta 2025.
"Ese es el problema, que en una cuestión tan importante como es la fiscalidad de este país, con un impacto tan relevante sobre el crecimiento económico, sobre el progreso social de nuestro país, necesitamos procesos que sean transparentes, procesos que den seguridad, que den confianza a los ciudadanos, al mercado, y esto está muy lejos de lo que necesitamos en este momento", ha especificado en concreto.
Ha pedido, también, que "alguien" les explique las consecuencias de las medidas que se está proponiendo y ha criticado los cambios de criterios, en pocas horas, en el diseño del nuevo impuesto al sector bancarios.
"Estamos hablando de impactos muy grandes y ya no es solo de impactos a las entidades. Esto es un impacto directo sobre el crédito, sobre la capacidad de financiar a las familias y a las empresas de este país, con lo cual estos procesos tan complicados, pues la verdad es que son muy difíciles, generan imprevisibilidad e incertidumbre", ha añadido.
Con respecto al impacto de 50.000 millones de euros sobre el crédito que supone el pago del impuesto a la banca (y con el que se ha recaudado casi 1.700 millones de euros en 2024 por los ingresos de 2023), Kindelán ha explicado que este pago afecta sobre la ratio de capital. Por un lado, está el capital en el numerador, mientras que en el denominador están los activos ponderados por riesgo (APRs).
"Si quitas 1.700 millones del numerador [es decir, de capital], en el denominador tienes que ajustar 50.000 millones por la ponderación por riesgo. Y como es por riesgo, afecta más a las pequeñas empresas y a las familias", ha explicado Kindelán, en referencia a que una pyme o una familia puede suponer mayor nivel de riesgo de impago que una gran empresa.
Así, ha afirmado que este impuesto genera "muchas cuestiones" que preocupan al sector, criticando también el hecho de que vaya contra ingresos, y no contra beneficio. "No tiene en cuenta la capacidad económica de los bancos, no tiene en cuenta los costes para protegerse de posible riesgos futuros", ha defendido.
También ha indicado la posibilidad de que este gravamen fragmente al mercado único, ya que puede aplicarse "de manera distinta" en cada comunidad autónoma en un momento en el que Europa está pidiendo "integrar mercados" y en un momento en el que las cosas "han cambiado" con respecto a cuando se anunció el impuesto en julio de 2022, coinciendo con el inicio de las subidas de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE).
Kindelán ha indicado que actualmente el entorno es de bajadas y de una "enorme incertidumbre geopolítica", más con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y que puede complicar todavía más "un mundo que ya estaba complicado".
Ha defendido que Europa tiene unas necesidades de inversión de 800.000 millones de euros y que, todavía, el 75% de la financiación la región depende de la banca.
AYUDAS POR LA DANA
Por otro lado, ha resaltado el papel de la banca para ayudar a los afectados por la DANA en Valencia. Ha recordado las moratorias y la línea ICO aprobadas, así como la ampliación del Código de Buenas Prácticas hipotecario para que los que estén afectados puedan centrarse en la reconstrucción.
Igualmente, ha indicado que el sector irá analizando el impacto de las medidas y adaptando las iniciativas a lo que se vaya necesitando.
Por último, ha resaltado la labor de Bizum, que ha recibido una "impresionante cantidad" de donaciones, cerca de 18 millones de euros, así como la labor de RedSys que ha podido desplegar una solución para que se pudiera hacer pagos en la zona a pesar de no tener cobertura.