¿Será mejor el 2023 para la libra que el año que está a punto de acabar? Es la pregunta que sobrevuela en la mente de muchos inversores, y a la que diferentes analistas tratan de dar respuesta en los últimos días. Lo cierto es que 2022 va a ser un ejercicio para olvidar en lo que respecta a la divisa británica, que cerrará con una caída del 11,6% frente al dólar y del 4,2% frente al euro. Esto es lo que auguran los expertos para los próximos doce meses.
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Se avecina la recesión para Reino Unido: su PIB se contrae un 0,3% en el tercer trimestre"Seguimos considerando que la libra es vulnerable y esperamos que el EUR/GBP se acerque a 0,90 a 6-9 meses vista". Son palabras de los estrategas de Rabobank, que han analizado las perspectivas para la divisa británica de cara a 2023 en uno de sus últimos informes. En concreto, apuntan que a pesar de que el 'cable' ha logrado recuperarse desde sus niveles más bajos (desde el mínimo del 26 de septiembre se ha recuperado un 11,8% frente al dólar y un 2,6% frente al euro), lo cierto es que las perspectivas siguen sin ser halagüeñas.
Y es que aunque "es innegable que el contexto político del Reino Unido se ha calmado desde que Rishi Sunak tomó las riendas", lo cual ha sido "bien acogido por los inversores tras el calamitoso mandato de Liz Truss y después del liderazgo plagado de escándalos de Boris Johnson", lo cierto es que el bajo perfil de Sunak puede jugar en contra de la libra.
"Últimamente ha habido pocas noticias nuevas sobre asuntos que llevan meses preocupando al Reino Unido", dicen los estrategas del banco holandés, en referencia a la resolución con la UE sobre el protocolo de Irlanda del Norte, que podría ayudar a definir la relación entre ambas regiones en los próximos años. Y a esto, remarcan, hay que añadir que "el telón de fondo fundamental del Reino Unido sigue caracterizándose por el débil crecimiento de la inversión, los bajos niveles de productividad y, ahora, la recesión".
Comentan desde Rabobank que el pasado 15 de diciembre el Banco de Inglaterra "volvió a fracasar en su intento de levantar la libra esterlina con la esperada subida de tipos, a pesar de que fue de 50 puntos básicos", debido, en su opinión, a que el BoE se vio superado por el "tono inequívoco de la presidenta del BCE, Christine Lagarde, y sus advertencias de que se avecinan nuevos endurecimientos".
"Aunque esperamos que el Banco de Inglaterra siga endureciendo su política monetaria a mediados del año que viene", dicen, el mensaje del organismo que lidera Andrew Bailey "se complicó por la postura pesimista de dos de los miembros del Comité de Política Monetaria". "Prevemos que el BoE podría mantener los tipos de interés en su nivel máximo (4,75%) durante algunos meses y no relajar la política hasta 2024. Dicho esto, la votación dividida en el Comité de Política Monetaria ha dado pie a que se hable de que el Banco de Inglaterra podría parpadear antes que el BCE y la Reserva Federal y que podría recortar los tipos antes de lo previsto", señalan los expertos de Rabobank.
En cualquier caso, destacan, aunque las perspectivas de los tipos de interés "son una parte fundamental de las perspectivas de cualquier divisa", Rabobank insiste en que el Banco de Inglaterra "ha tenido un éxito limitado a la hora de reforzar el valor de la libra con subidas de tipos, al menos desde la primavera".
Como apunta la entidad holandesa, "las sombrías previsiones económicas del BoE tanto en mayo como en agosto hicieron que la divisa cayera en respuesta a las subidas de tipos de interés en esos meses. En diciembre, la libra también cayó en respuesta a la política monetaria" porque el banco central británico recordó al mercado que se espera que la economía de Reino Unido esté en recesión "durante un periodo prolongado", mostrándose además más pesimista sobre el futuro.
Todo eso puso freno a la divisa británica, y por ello Rabobank apunta que "para que las perspectivas de la GBP avancen significativamente, es probable que la inversión y el crecimiento de la productividad tengan que mostrar signos de mejora".
"Esto puede requerir un liderazgo más visible por parte del primer ministro Sunak, aunque las divisiones en su propio partido probablemente resultarán difíciles de gestionar", opinan estos analistas, que también dicen que aunque una solución viable sobre el protocolo de Irlanda del Norte podría aportar nueva claridad sobre la relación del Reino Unido con Europa, ésta sigue siendo una cuestión "profundamente difícil".
"En conjunto, esperamos que los fundamentos del Reino Unido sigan siendo agrios en los próximos meses", concluyen, y de ahí sus previsiones para la libra esterlina.