El peso mexicano se recupera marginalmente de sus fuertes caídas del martes contra el dólar y el euro, después de la noticia de la dimisión del ministro de Hacienda de Andrés Manuel López Obrador (conocido como AMLO), Carlos Urzúa. La divisa azteca pone tierra de por medio con el mínimo de un mes de ayer, en las 19,35 unidades por cada 'billete verde', aunque no abandona las caídas.
Con todo, la fuerte volatilidad de la jornada pasada ha quedado aparcada este miércoles y cede un 0,1% ante su contraparte estadounidense, hasta las 19,1740 unidades. Ayer se movió en un amplio rango de un 2,5% de máximos a mínimos, movido por el pánico desatado por estos sucesos. "La dimisión del responsable de las finanzas aztecas con una carta publicada en Twitter pone de relieve la fragilidad de las instituciones mexicanas bajo la administración de AMLO y suprime la confianza de los inversores sobre la estabilidad de la economía mexicana", indica Olivia Álvarez, analista de Monex Europe.
El peso había recuperado más de 4 puntos porcentuales frente al euro en el último mes, tras la cancelación de las amenazas arancelarias de Donald Trump. Con estos eventos, "los tenedores de peso para operaciones de acarreo cierran sus posiciones, por temor a que la volatilidad del peso no compense el atractivo diferencial de rendimientos que ofrece la moneda frente a otras divisas de financiación como el euro y el dólar".
El cargo de Urzúa fue rápidamente ocupado por el viceministro de Hacienda, Arturo Herrera, quien al igual que su predecesor, es visto por los mercados como una figura sólida para la conducción de la política fiscal. Este remplazo logró contener las pérdidas del peso a la apertura de la sesión europea. Sin embargo, las declaraciones de Urzúa, un estrecho aliado de López Obrador, levantan sospechas de que bajo la administración de AMLO, las políticas públicas están sujetas a numerosas arbitrariedades.
LA DIMISIÓN
"Estimado presidente López Obrador, no sin antes manifestarle mi profundo agradecimiento por haberme dado la oportunidad de servir a México durante este primer año de su Administración, me permito comunicarle que he decidido renunciar a partir de esta fecha a mi cargo de Secretario de Hacienda y Crédito Público", ha dicho en una carta que ha difundido por Twitter.
Agradezco la oportunidad de haber podido servir a México. pic.twitter.com/aaa2cIa9uI
— Carlos Urzúa (@CarlosUrzuaSHCP) 9 de julio de 2019
Urzúa ha revelado que "discrepancias en materia económica hubo muchas, algunas de ellas porque en esta Administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento".
"Estoy convencido de que toda política económica debe realizarse con base en evidencia, cuidando los diversos efectos que ésta pueda tener y libre de todo extremismo, sea este de derecha o izquierda. Sin embargo, durante mi gestión las convicciones anteriores no encontraron eco", ha lamentado.
En concreto, ha indicado que le resultó "inaceptable" la "imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública". "Esto fue motivado por personajes influyentes del actual gobierno con un patente conflicto de interés", ha apostillado, sin dar nombres.
"La noticia genera mayores temores de que la nota soberana mexicana sea degradada por agencias calificadoras como Moody´s y S&P, las cuales mantienen una perspectiva negativa de las cuentas públicas mexicanas", subraya Álvarez. "El riesgo de que estas agencias se unan a Fitch en degradar a Mexico a solo un escalón del grado basura, pone gran estrés sobre la estabilidad de la economía y el peso mexicano", redondea.