- El dólar sigue apreciándose contra el yen y pone los 110 yenes en el punto de mira
- El euro, bajo gran presión bajista por el efecto Trump y los riesgos políticos en la zona euro
Casi una semana después de la victoria de Donald Trump en las elecciones de EEUU, los operadores siguen dejándose llevar por la euforia y repiten el patrón que se ha visto en los últimos días: se deshacen de la renta fija estadounidense -y de otros países- para subirse a la ola compradora del dólar y la renta variable. En el mercado de las divisas, esto también se traduce en agudas pérdidas en la mayoría de monedas principales y en un índice del dólar que surca los cielos hasta prácticamente máximos de casi 14 años.
El indicador que mide el desempeño de la divisa de EEUU contra una cesta de monedas ha dejado un máximo en la sesión asiática en los 100,22 puntos y ha estado a punto de superar los 100,51 puntos alcanzados en diciembre de 2015. De lograrlo, se situaría en máximos de más de 13 meses y medio, en el pico de abril de 2003. Poco después, ha retrocedido hasta niveles por debajo de los 100 puntos.
La opción más inteligente para los operadores es esperar a un movimiento en forma de pullback hasta los 107 yenes
El “billete verde” también ha alcanzado un máximo de cinco meses contra el yen la pasada noche, en los 108,545 yenes, para luego retroceder un 0,3% hasta los 108,12 yenes. Desde que el republicano es el nuevo inquilino de la Casa Blanca, el yen se ha depreciado un 6,8% contra su rival estadounidense y expertos apuntan a que el próximo objetivo son los 110 yenes. “Sin embargo, la opción más inteligente para los operadores es esperar a un movimiento en forma de pullback hasta los 107 yenes y no tratar de perseguir la tendencia alcista actual”, alerta Kathy Lien, fundadora de BK Asset Management.
La experta señala que la euforia en el dólar proseguirá, pero advierte que “dada la enorme volatilidad en el mercado de las divisas” y las abruptas depreciaciones de otras monedas como el euro, el franco suizo y el dólar canadiense, que han dejado mínimos de varios meses contra el “billete verde”, “el riesgo de agudas correcciones es cada vez mayor también”.
Sin embargo, “mientras los inversores continúen deshaciéndose de sus bonos, no se verán retrocesos significativos en el dólar”, asegura la analista. El diferencial de los bonos de EEUU -cuya rentabilidad alcanzó el 2,3% intradiario el lunes- con los de otras regiones como Reino Unido o la zona euro sigue ampliándose, “con lo que esperamos que el dólar se siga viendo favorecido en el corto plazo”, subraya Lien.
EL EURO, HACIA LOS 1,0500 DÓLARES
Otra de las grandes historias en el mercado de las divisas han sido las ventas en el euro, que se están viendo impulsadas, no sólo por el auge del dólar, sino porque la victoria de Trump se ha tomado como la punta de lanza para los movimientos anti-europeístas que recorren el viejo continente. El riesgo para la “moneda única” lo encarna el referéndum sobre la reforma de la Constitución en Italia, ya que una victoria de “no” a la reforma del primer ministro Mateo Renzi podría desatar un efecto dominó que pasa por el reemplazo de los movimientos anti globalización a Renzi en el país transalpino y que, en última instancia, supondría la salida de Italia del euro.
El otro peligro para la “moneda única” está en Francia, donde el Frente Nacional de Marine Le Pen también cree que la victoria de Trump le podría abrir las puertas del Elíseo en las elecciones de 2017. El euro no se muestra ajeno a todas las turbulencias que se desencadenan a su alrededor y ya ha perdido un 6% frente al dólar en menos de una semana. La divisa es una venta en los rallies, tal y como indica Boris Schlossberg, analista de divisas de BK asset Management, quien apuesta por caídas hacia el área de los 1,05 dólares.
LA LIBRA SE GIRA A LA BAJA
En cuanto a la libra, la divisa británica también se ha rendido al nuevo imperio del dólar y después de protagonizar ascensos durante tres sesiones, finalmente se ha doblegado a la fortaleza del “billete verde”. “El pullback en la libra obedeció completamente a la toma de beneficios”, comenta Kathy Lien y llama a estar alerta a los datos macroeconómicos de Reino Unido.
Los precios en Reino Unido subieron menos de lo esperado en el mes de octubre, según los últimos datos publicados. El Índice de Precios al Consumo (IPC) del mes pasado aumentó un 0,1%, por debajo del aumento del 0,2% registrado en septiembre y de la previsión del 0,3% anticipada por los expertos.
En tasa interanual, que mide la evolución de los precios durante los últimos doce meses, la subida ha sido del 0,9%, por debajo del 1% anterior y del 1,1% pronosticado por el consenso. Por su parte, la tasa de inflación subyacente, que excluye la evolución del precio de alimentos y energía, se situó en tasa interanual en el 1,2%, por debajo del 1,5% previsto y del 1,5% de septiembre.
La libra ha reaccionado con caídas de un 0,7% al anuncio, desde los precios que cotizaba antes de la publicación del dato. La divisa ha perdido momentáneamente el soporte de los 1,2400 dólares, para recuperarse algo más de un 0,3% poco después. "Sólo un movimiento por debajo de los 1,2330 dólares abrirá la perspectiva de nuevas caídas hacia el área de los 1,2100 dólares", señala Michael Hewson, analista de CMC Markets.