Viñales bate a Quartararo y se sitúa en la 'pole position' para el Mundial 2020

En una jornada fría, con malas condiciones climáticas en su inicio, este segundo día de 'test' dejó claro que las Yamaha son rápidas a una vuelta, y que intentarán desarrollar sus motos para ser un auténtico obstáculo para el Repsol Honda Team de los hermanos Marc y Àlex Márquez, ya que el tercero en discordia este miércoles fue Franco Morbidelli (Yamaha).

Aunque los tiempos en los entrenamientos de postemporada no sean significativos para confirmar nada de cara al siguiente Mundial, tanto Viñales, con su 1:29.849, como Quartararo, a 164 milésimas del de Roses y que ya fue el más rápido el martes, encaran el invierno con optimismo y ganas.

La primera Honda fue la de un Cal Crutchlow que logró el cuarto mejor registro, ya a casi medio segundo de Viñales, mientras que Joan Mir (Suzuki) superó a su compañero Àlex Rins, en quinta y sexta posición respectivamente justo por delante del vigente campeón del mundo, un Marc Márquez (Repsol Honda) que trabajó de lo lindo.

El de Cervera rodó con varias motos, incluida una Honda 'all-black' con nuevo carenado pensando en darle una vuelta de tuerca más a la moto campeona del mundo. Llevará la misma montura su hermano Àlex bien pronto, pero de momento el pequeño de la saga Márquez sigue con la LCR de Takaaki Nakagami y terminó la jornada en vigésima posición, medio segundo más rápido que el primer día.

Ambos hermanos protagonizaron uno de los momentos del día al protagonizar una primera y lenta, además de amistosa, batalla. Por unos momentos, el campeón de Moto2 rodó justó por delante del de MotoGP, que le adelantó en el 'curvone' y le dejó atrás pese a ir girando el cuello para comprobar si el recién llegado le seguía o no la estela.

Marc Márquez llegó a liderar la jornada, igual que Pol Espargaró (KTM) o Fabio Quartararo, pero Viñales se puso en lo más alto de la tabla y ya no quiso desprenderse de ese mejor tiempo en el global de las dos jornadas bajando a 1:29, algo que no logró el fin de semana en el Gran Premio de la Comunitat Valenciana.

Fue una jornada algo agobiante para muchos pilotos, como un Valentino Rossi (Yamaha) que, más allá de lograr el noveno mejor tiempo, dio 68 vueltas en el circuito valenciano pese a ser el último en salir a pista, prácticamente dos horas después de que se izara la bandera verde en Cheste. No obstante, en su afán de adaptación, fue Àlex Márquez quien dio más vueltas (79).

Hubo varias caídas, sobre todo en las primeras horas y en la parte final. Probaron el asfalto de Cheste Pol Espargaró (KTM), que tuvo además problemas mecánicos pero se recuperó para ser octavo, también se fue al suelo su hermano Aleix Espargaró (Aprilia), decimosexto, y el debutante Iker Lecuona (KTM), decimoquinto.

Pero la chispa del día la puso, sin quererlo, el italiano Andrea Iannone (Aprilia) cuando su moto se prendió en llamas, en plena recta, por una rotura de motor. Un comisario apagó el fuego con un extintor pero no se pudo evitar la bandera roja al haber aceite en pista.