El capitán del Real Madrid y de la selección española, Sergio Ramos, dio positivo en un control antidopaje tras la final de la Champions League en 2017 y violó el protocolo antidopaje tras un partido de Liga en Málaga en abril de 2018, según un informe de la UEFA filtrado por Football Leaks al diario alemán Der Spiegel este viernes.
Según el informe, Ramos dio positivo por dexametasona en un control que se llevó a cabo tras el triunfo de su equipo en la final de la Champions League disputada en Cardiff. El Real Madrid había informado previamente a la UEFA de que el jugador se había suministrado una sustancia diferente, betametasona, y la UEFA aceptó que se había tratado de un error al aportar la información.
El segundo episodio mencionado por Der Spiegel tuvo lugar en abril de 2018 tras un encuentro disputado por el Real Madrid en el estadio de La Rosaleda, en Málaga. El jugador madridista fue requerido para un control antidopaje y Ramos decidió ducharse antes de aportar la prueba de orina, algo que no está permitido y que los propios oficiales de la agencia antidopaje española le indicaron no hacer.
El Real Madrid ha alegado, a través de un comunicado el viernes por la tarde que "Ramos nunca ha incumplido la normativa de control antidoping" y ha aclarado que "UEFA solicitó información puntual y cerró el asunto referido inmediatamente, como es habitual en estos casos, tras la verificación de los propios expertos de la agencia mundial antidopaje, AMA, y de la propia UEFA".