MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
La A-League, el principal campeonato australiano de fútbol, anunció este lunes que continuará con su actividad programada pese a la amenaza del coronavirus, que tiene a dos de sus equipos en cuarentena, aunque sus partidos serán a puerta cerrada.
El aislamiento al que deben estar sometidos durante 14 días el Wellington Phoenix, tercer clasificado, y el Melbourne Victory, décimo, había provocado la posibilidad de que se suspendiese la liga, pero tanto la A-League como la Federación de Fútbol de Australia (FFA) han preferido no parar y estudiar la posibilidad de reestructurar el campeonato.
"La FFA confirmó este lunes que el resto de la temporada regular de la A-League y la Gran Final de la W-League programada para este fin de semana seguirán adelante, pero que todos los partidos se jugarán a puerta cerrada y sin aficionados autorizados a asistir. Esta política se aplicará a las seis rondas restantes de la temporada regular y se revisará para la Serie Final", expresó la A-League en un comunicado en su web.
El organismo apuntó que, por su obligatoria cuarentena, los partidos que involucren a Melbourne Victory y Wellington Phoenix no se celebrarán en las dos próximas jornadas y que "se reprogramarán", mientras que el conjunto neozelandés "jugará todos sus partidos en Australia durante el resto de la temporada".
El presidente de la A-League, Greg O'Rourke, también reconoció la "intención comprimir el resto de la temporada" y abogó por lo positivo de continuar con la campaña. "Creemos que con los hechos que tenemos en la mano es una mejor solución que suspenderla y calcular lo que sucederá con la situación de salud en los próximos meses", añadió.
"El Comité de Trabajo de COVID-19 se reunió este domingo 15 de marzo para discutir los últimos desarrollos de COVID-19 y considerar los últimos consejos del Gobierno Federal y del Director Médico. Después de una cuidadosa consideración y coherente con ese consejo, la FFA informa que el fútbol puede continuar jugándose en toda Australia en este momento", expresó por su parte James Johnson, CEO de la Federación Australiana de Fútbol (FFA) en la web del organismo.
El directivo indicó que desde este mismo momento todos los participantes deberán "cumplir con las pautas" que han diseñado para ayudarles "a tomar precauciones adicionales y medidas preventivas para ayudar a retrasar la propagación de COVID-19".