MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
El Leganés consiguió la primera victoria de la temporada tras derrotar al Mallorca (1-0) gracias a un solitario tanto de Martin Braithwaite e hizo bueno el debut de Luis Cembranos como técnico tras la dimisión de Mauricio Pellegrino, mientras que el Valladolid no tuvo problemas para dejar los puntos en casa frente al Eibar tras una gran primera mitad (2-0).
Han pasado diez jornadas hasta que el Lega ha estrenado su casillero de triunfos. Lo logró este sábado en casa, con un Butarque a reventar, y tras un sólido partido de los pepineros, que cambiaron de sistema con la llegada de Luis Cembranos como nuevo director de orquesta. El técnico del filial se estrenó en la Liga Santander y no pudo hacerlo de mejor manera.
Braithwaite marcó el único gol del partido a la media hora. El danés aprovechó un centro de Rosales en el segundo palo para marcar con la suela de la bota. Un gol que liberó a la afición blanquiazul y sirvió para contener a un Mallorca que sólo inquietó al Lega en los minutos finales de partido con una doble ocasión.
Antes, perdonó Arnáiz en un tres para uno y acto seguido llegaron los disparos de Raíllo y Trajkovski, pero nada cambió el marcador en Butarque y los puntos se quedaron en casa haciendo bueno el dicho de "a entrenador nuevo, victoria segura". Destacó la aportación de Christian Rivera, que debutó este sábado con la casaca leganense a un gran nivel.
De esta forma, el Lega suma cinco puntos y abandona provisionalmente el farolillo rojo en Primera División. Por su parte, el equipo de Vicente Moreno -que llegaba de ganar al Real Madrid en Son Moix- se queda en la decimoquinta posición a la espera del resto de resultados de este domingo.
Quienes también vivieron una bonita tarde fueron los jugadores del Real Valladolid, que se estrenaron en el José Zorrilla venciendo al Eibar en un partido muy completo de los pucelanos (2-0). Sergi Guardiola abrió la cuenta a los diez minutos con un fuerte zurdazo y Salisu completó la victoria con un cómodo gol a poco del descanso.
Los de Sergio González fueron muy superiores a un Eibar que sólo reaccionó en el ecuador del choque con balones bombeados y acciones individuales de Orellana, el mejor en los armeros. Sin embargo, el cuadro de Pucela supo guardar su área e incluso inquietó a su rival en alguna contra que estuvo a punto de ampliar la cuenta.
De hecho, el Valladolid logró el tercer gol de la tarde, en botas de Óscar Plano, pero fue anulado por un ajustado fuera de juego. Y el mismo protagonista desperdició un claro mano a mano a quince minutos del final. Antes de esa jugada Expósito pudo haber metido al Eibar en el partido si un remate desde la frontal no se hubiese estrellado en el larguero.
El equipo de José Luis Mendilibar no termina de despegar, acumula dos derrotas consecutivas y se mantiene muy cerca de los puestos de descenso, mientras que el Valladolid -con 11 puntos- suma cinco encuentros sin perder y da un salto hacia la mitad de la tabla con la duodécima posición.