- El equipo alemán tiró de orgullo en los minutos finales y logró la remontada
- Los de Luis Enrique sestearon en el último tramo
- Otra exhibición de Ter Stegen que dejó una parada antológica
El F.C. Barcelona ya espera rival para la final de Berlín. El equipo azulgrana estará en la máxima cita del fútbol europeo después de caer 3-2 ante el Bayern, gracias a la renta lograda en el encuentro de ida en el que vencieron por 3-0.
El conjunto de Luis Enrique alcanza su octava final de la más alta competición europea ante un Bayern que salió a presionar desde el principio, como no podía ser de otra manera. En un córner, rematado por Benatia, llegaría el primer zarpazo, para poner a su equipo por delante y darle esperanzas de hacer algo tras el contundente 3-0 de la ida.
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Nada más lejos de la realidad. Neymar volvió a tirar del carro para acabar de un plumazo con cualquier atisbo de remontada alemana. Primero, culminando un pase de Suárez que era medio gol. El uruguayo recibió un envió perfecto de Messi y en profundidad, encaró a Neuer y cedió para que el brasileño anotara a placer.
El Bayern siguió atacando y ahí comenzó el recital de Ter Stegen, que sacó un disparo a la escuadra y realizó un par de paradas más que dieron seguridad al equipo. Con esa tranquilidad atrás, el Barça 'mató' a su rival con otro picotazo. En un calco del empate, de nuevo Messi inició la contra para Suárez que la puso otra vez al segundo palo para Neymar. El brasileño controló con calma y la mandó al palo corto para adelantar a su equipo.
Antes del descanso, Stegen realizó la parada de la noche --y del año-- al responder con firmeza y reflejos a un lanzamiento a bocajarro de Lewandowski. La pelota salió desviada y se envenenó a gol, pero el guardameta reaccionó rapidísimo y sacó la pelota en la misma línea de gol.
EL BARÇA SESTEA Y EL BAYERN REACCIONA
Tras el descanso, Luis Enrique sacó a Luis Suárez, aquejado de una sobrecarga en los isquiotibiales y entró Pedro. El Barça se echó a dormir con la renta de cinco goles y ahí se crecieron los locales. Lewandowski marcó el empate con un movimiento magnífico de delantero puro, pisando el balón y abriéndose el hueco para sacar un disparo ajustado al palo.
Poco después, Muller firmaría el tanto de la victoria después de una dejada de Schweinsteiger en la frontal, que le habilitó para poder sacar el disparo. Así las cosas, el equipo azulgrana alcanza de nuevo la final europea y se cita con el Real Madrid para un duelo nunca visto y que sería histórico. Antes, el equipo blanco tendrá que remontar ante la Juventus.
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