El Día del Libro y la Rosa de 2021 se encara con grandes expectativas por parte de los libreros, que vieron como esta fecha tan señalada en comunidades como Cataluña se suspendió en 2020 a causa de la pandemia. Pese a las restricciones vigentes en toda España para contener el avance de la pandemia, gremios y asociaciones esperan que los lectores se vuelquen con los autores en el Sant Jordi del 'desquite' y las previsiones de ventas son de copar el 60% de la facturación de 2019.
Las ventas del primer trimestre no podían ser mejores. El importe global asciende a 87 millones de euros, cifras superiores a las registradas en 2020 y 2019, cuando se situaron en 78 y 85 millones, respectivamente. Según ha informado la Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros en un comunicado, a pesar de que prosiguen las restricciones de aforo y los horarios reducidos en algunas zonas, se preparan para celebrar con sus comunidades de lectores el 23 de abril con "centenares de propuestas de actividades por todo el territorio".
Han mencionado algunas como "las mesas de recomendaciones", a las que se sumará el "optimismo de un cierre del año 2020 no tan trágico como se vislumbraba y un primer trimestre de 2021 que sigue mostrando el apoyo de los lectores a sus espacios físicos y al libro de papel". Asimismo, han recordado que hace justo un año "las librerías tenían las puertas cerradas debido a la pandemia".
EL SANT JORDI DE LA ILUSIÓN
El sector editorial y del libro de Catalunya prevé que este Sant Jordi permita facturar un 60% del total de las ventas recaudadas el Día del Libro y la Rosa de 2019, y que suponga un incremento de las ventas por Internet. El presidente de la Cambra del Llibre de Catalunya y del Gremi d'Editors de Catalunya, Patrici Tixis, aseguró que espera que este Sant Jordi refuerce los comercios de proximidad y reivindique el libro en papel, esencial para la salud emocional de las personas durante el confinamiento.
Por su parte, el Gremi de Floristes de Catalunya quiere que en este Sant Jordi se vendan entre 3,5 y 4 millones de rosas, mientras que Mercabarna augura unas ventas de 4,2 millones, lo que supone un 40% menos que las comercializadas en 2019, cuando se alcanzaron los siete millones de unidades.