El rector de la URJC defiende que la desvinculación con el Instituto Alicia Alonso está avalado por informes técnicos

Ramos ha comparecido, tras ser citado en calidad de querellado, tras ser denunciado por presunta prevaricación, malversación, delito contra la propiedad intelectual y coacciones por parte de los responsables del Instituto.

Fuentes universitarias han señalado a Europa Press que la comparecencia del rector ha sido breve y ha mantenido que la decisión adoptada está fundamentada en criterios técnicos recogidos en un informe de Intervención de la institución.

En este sentido, ha insistido en que la encomienda de gestión suponía aportar un millón de euros y la cesión de instalaciones de la universidad al instituto.

El rector explicó el año pasado a la comunidad universitaria que la decisión de asumir totalmente la gestión de los grados de artes visuales y danza, dado que las "exigencias legales" y "los cánones de transparencia en los que quiere situarse la URJC no permitían la vinculación con el Instituto de Danza Alicia Alonso.

Además, recalcó que se intentó llegar a un acuerdo negociado con esta entidad pero finalmente los contactos no fructificaron. Por ello, la URJC asumió la gestión de estos grados "sin perjuicio de que en el futuro se pueda llegar a otro tipo de colaboraciones con el Instituto de Danza Alicia Alonso".

Tras conocer que había sido citado por esta querella, el rector de la URJC manifestó su malestar. "Iré (a declarar), no solo por mi obligación de atender los llamados de la justicia, sino por la tranquilidad que me da el estar defendiendo que no todo vale, que el dinero público es sagrado, que los negocios particulares son eso, particulares y, por tanto, no tienen cabida entre los muros pagados con los impuestos de todos los ciudadanos", espetó Ramos.

Por su parte, el director del Instituto Alicia Alonso, Alberto García, aseguró recientemente que la querella, dirigida contra el rector y contra la institución, apunta a delitos de prevaricación, malversación, contra la propiedad intelectual y coacciones.

Según relató, el rector comunicó, el 24 de julio, su voluntad de rescindir el convenio a la finalización del curso 19/20, garantizando la continuidad de todas las actividades en curso hasta su finalización. Sin embargo, siempre según García, el 14 de octubre el rector "se desdice", al comunicar al Instituto la ruptura de las relaciones a partir del 1 de noviembre.

En este momento, los estudiantes iniciaron tres semanas de huelga, ya que al asumir la URJC su formación y dejar de ser alumnos del Instituto Alicia Alonso, veían "peligrar" sus prácticas en teatros, además de sus calificaciones, ya que se "anulaban las que ya habían obtenido".

También cree que el rector y la universidad podría haber incurrido en "malversación" al haber procedido a llevar a cabo una "contratación irregular de profesores que debían sustituir a los del Instituto Alicia Alonso".