ep mpm reivindicaolga khokhlova primera mujerpicasso ypapella vida
MPM reivindica a Olga Khokhlova, primera mujer de Picasso, y su papel en la vidaMPM

La muestra se sitúa en el umbral de la vida íntima y del arte

MÁLAGA, 25 (EUROPA PRESS)

El Museo Picasso Málaga (MPM) ha presentado este lunes la exposición 'Olga Picasso', con la que inaugura su programa expositivo para 2019 y que muestra los años que compartieron como pareja, poniendo en perspectiva la realización de algunas de las grandes obras del artista malagueño Pablo Ruiz Picasso, y reconstruyendo esta producción en el marco de una historia personal que transcurre paralela a otra historia política y social.

Así, la pinacoteca mostrará hasta el 2 de junio la figura y la historia de Olga Khokhlova, primera esposa de Pablo Ruiz Picasso en una muestra que surge de las cartas y fotografías encontradas en el baúl de viaje de esta bailarina rusa, abuela de Bernard Ruiz-Picasso, uno de los comisarios y figura esencial en la creación y en el día a día del MPM.

'Olga Picasso' ofrece una nueva lectura acerca del papel que esta mujer jugó tanto en la vida del artista, como en la historia del arte. Es el resultado de un trabajo de investigación que nace de los archivos de Olga Khokhlova.

La exposición, que muestra unos 350 objetos, incluyendo pinturas, obras en papel, fotografía, cartas, documentación y películas, está co-comisariada por Émilia Philippot, conservadora del Musée National Picasso-Paris; Joachim Pissarro, profesor de Historia del Arte y director del Hunter College Art Gallery (Nueva York); y Bernard Ruiz-Picasso, copresidente de la Fundación Almine y Bernard Ruiz-Picasso para el Arte (FABA) y presidente del Consejo Ejecutivo y miembro del Patronato del Museo Picasso Málaga.

Además, para el Museo Picasso Málaga, la exposición ha sido adaptada por José Lebrero, director artístico de la pinacoteca, y Sofía Díaz, coordinadora de exposiciones.

Olga Khokhlova se incorporó en 1911 a los Ballets Rusos. Así, conoció a Pablo Picasso en Roma en la primavera de 1917, cuando el artista realizaba los decorados y el vestuario del ballet Parade. Ambos contrajeron matrimonio en París en 1918 y en febrero de 1921 nació su primero y único hijo, Paulo. La pareja se separó en 1935, aunque continuaron casados hasta la muerte de ella en Cannes, en el año 1955.

José Lebrero ha dicho que en las obras de Picasso que se pueden ver en Málaga se ve "una historia" de "dos hijos de las migraciones culturales", que "se amaron, y como cualquier otra gran relación, se quemaron, quizá por aquello de que querer demasiado es quemar", ha dicho. "Es una historia de amor, pero es una gran presentación de obras de Picasso", ha afirmado Lebrero, que ha recordado que son unas 133 obras del artista malagueño y 218 objetos de archivo.

Bernard Ruiz Picasso ha asegurado que le emociona esta muestra, "un proyecto complejo y de gran magnitud que tomó muchos años" para realizarse y "elevar la figura de mi abuela Olga". De igual modo, ha destacado que esta exposición contiene "obras maestras" que vienen de otras instituciones y ha dicho que es "un momento importante" para el Museo Picasso de Málaga.

La consejera de Cultura, Patricia del Pozo, ha presentado la muestra y ha destacado que Picasso "lo fue todo en el arte, pero siempre tuvo una dama en las proximidades" y ha valorado que la muestra "propone una relectura acerca de Olga, del papel que ya jugó en la vida de Picasso como en la historia del arte". Asimismo, ha explicado que la exposición se sitúa en el umbral de la vida y del arte de Picasso, ya que "por un lado nos permite asistir a su proceso creativo, pero, por otro, nos permite adentrarnos en su intimidad".

Joachim Pissarro, de igual modo, ha incidido en la importancia de la exposición de Picasso en el marco de la historia del arte, al tiempo que ha añadido que "encontrar un único elemento que aún no ha sido estudiado constituía algo realmente extraordinario, casi imposible", pero ha sido "gracias a la generosidad de Bernard y la Fundación por compartir este gran baúl".

Émilia Philippot, por último, ha incidido en el descubrimiento del "famoso baúl". "Eso nos ha permitido una nueva lectura de los retratos de este periodo", ha afirmado, precisado que se buscaba ver "la relación de Picasso y Olga" como "una lectura", lo que permite "mirar su trabajo de una manera más íntima".

BAÚL DE VIAJE Y UNA HISTORIA PERSONAL

En rueda de prensa, han detallado que del baúl de viaje de aquella bailarina rusa, que su hijo recibió al heredar la mansión de Boisgeloup y que actualmente es propiedad de la Fundación Almine y Bernard Ruiz-Picasso para el Arte, surgieron las cartas y fotografías que han permitido recrear una historia personal y artística que transcurre paralela a otra historia política y social.

El contenido de aquella valija, el único bien personal que ella conservó tras su separación de Picasso, ha permitido contextualizar algunos aspectos del trabajo de Picasso durante su vida con Olga.

"MODELO PREDILECTA"

Olga se convirtió en la "modelo predilecta" del artista y en la figura femenina más representada por el pintor desde finales de los años 1910, ocupando un lugar destacado a principios de los años 1920. Los numerosos retratos de corte clásico que Picasso realizó de su esposa muestran su belleza de manera "melancólica y pensativa" en unos años en los que su familia en Rusia, a la que vio por última vez en 1915, vivía los acontecimientos históricos de la revolución de febrero, la abdicación del zar Nicolás II, la revolución bolchevique y la posterior guerra civil. Olga aparece primero bajo una línea fina y elegante, marcada por la influencia de Ingres.

Con el paso del tiempo, la joven pareja ascendía socialmente al mismo ritmo que aumentaba el reconocimiento de la obra del artista. También Olga inspiró numerosas escenas de maternidad, plasmadas con una ternura y serenidad desconocidas hasta la fecha en la obra de Picasso.

Paulo, que era objeto de todas las atenciones de una madre afligida por las noticias que le llegaban desde su país natal, era también orgullo de su padre, quien, de nuevo interesado por el circo como tema e inspirado por los juegos de la infancia, realiza de él varios retratos. También en esta exposición pueden contemplarse películas inéditas de la vida privada de la pareja.

LA METAMORFOSIS

No obstante, la figura imaginada de Olga se irá "metamorfoseando" a partir de 1924, conforme se va deteriorando el vínculo entre ellos, aunque siguió impregnando la obra de Picasso hasta su separación e incluso más tarde.

El encuentro del artista con Marie-Thérèse Walter en 1927 acentúa la crisis del matrimonio que finalmente se separa en 1935. Picasso empieza a representar a Olga de modo "inquietante, deformado y hasta brutal", con una violencia que expresa "tanto la cólera de los celos como el sufrimiento del artista, mientras que la nueva musa se revela en su obra con toda la energía de la juventud y el erotismo que inspiraban al artista".

Dividido entre su deber hacia Olga como esposo y padre de Paulo, y su pasión por Marie-Thérèse Walter (que en 1935 dio a luz a Maya), plasmará su historia personal inspirado por la mitología. Tras la separación definitiva, la presencia de Olga en la obra de Picasso se diluye y es ocupada por otras modelos, durante unos años en los que la soledad y el dolor derrotaron el ánimo de aquella bailarina rusa.

Bernard Ruiz-Picasso ha afirmado que conocer más sobre su abuela fue lo que impulsó la tarea de encargar la traducción de las más de 600 cartas redactadas en ruso que Olga recibió de su familia entre 1919 y 1933. Se trata de unas misivas que han permitido desgranar el destino "trágico y lejano de sus padres, hermanos y parientes, mientras ella disfrutaba de una vida confortable en París, junto a Picasso".

La muestra, que es un proyecto itinerante fruto de la colaboración de cuatro instituciones artísticas internacionales, se ha mostrado ya en el Museé National Picasso-Paris y en el Museo Pushkin de Moscú del 19 noviembre 2018 al 4 febrero 2019.

contador