2022 está siendo un mal año para las criptomonedas. El bitcoin, por ejemplo, ha perdido casi dos tercios de su valor en lo que va de año y este miércoles lucha por recuperar los 17.000 dólares. Sin embargo, lo peor para la criptomoneda reina podría estar por llegar. Según Standard Chartered, el bitcoin podría caer un 70% durante 2023 y alcanzar los 5.000 dólares, niveles no vistos desde marzo de 2020.
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La arriesgada apuesta de Tim Draper: el bitcoin valdrá 250.000 dólares en 2023“Los rendimientos se desploman junto con las acciones tecnológicas, y aunque la venta masiva del bitcoin se desacelera, el daño ya está hecho. Cada vez más empresas e intercambios de criptomonedas se encuentran con liquidez insuficiente, lo que lleva a más quiebras y a un colapso de la confianza de los inversores en los activos digitales”, ha señalado Eric Robertsen, jefe global de investigación de la firma británica.
Con todo, Robertsen ha indicado que los escenarios “extremos” tienen menos probabilidad de ocurrir durante el próximo año, aunque los inversores siguen nerviosos ante el desconocimiento de cuán lejos llegará el efecto contagio provocado por la caída de FTX. “Caen materialmente fuera del consenso del mercado o de nuestras propias opiniones de referencia”, ha añadido.
Asimismo, este experto considera que la caída en el precio del bitcoin coincidirá con un repunte del oro, asegurando que el metal precioso podría repuntar un 30% hasta los 2.250 dólares “a medida que las criptodivisas caigan aún más y más empresas de cripto sucumban a las restricciones de liquidez y a las retiradas de los inversores”.
“El resurgimiento del oro en 2023 se produce cuando la renta variable reanuda su mercado bajista y la correlación entre los precios de la renta variable y la renta fija vuelve a ser negativa”, ha añadido, al tiempo que ha asegurado que el oro podría recuperar su valor de refugio seguro para los inversores en lo que prevén que será un 2023 volátil.
La opinión de Standard Chartered se parece mucho a la del célebre inversor Mark Mobius, quien recientemente pronosticó una caída hasta los 10.000 dólares para la criptomoneda reina. Mobius ha reconocido que no invertiría su dinero o el de sus clientes en ningún activo digital ya que son “demasiado peligrosos” en estos momentos.
Por el contrario, Tim Draper ha redoblado su apuesta por el bitcoin y ha asegurado que alcanzará el nivel de 250.000 dólares el próximo año. Para llegar a este nivelo, la mayor criptomoneda del mundo tendría que repuntar más de un 1.000%.