El dueño y fundador de la malograda plataforma de criptoactivos Sam Bankman-Fried ha sido puesto en libertad bajo fianza de 250 millones de dólares tras comparecer por primera vez ante un tribunal de EEUU acusado de fraude por la quiebra de la bolsa de 'criptos'.
El fiscal federal Nicholas Roos subrayó que es una de las mayores fianzas previas al juicio en la historia estadounidense. Sus condiciones le obligan a vivir con sus padres y a someterse a vigilancia electrónica.
Bankman-Fried, de 30 años, se enfrentará a su próxima vista en Nueva York el 3 de enero, donde presentará su declaración y será procesado.
La fianza está garantizada por el capital de su casa familiar y por las firmas de sus padres y de otras dos personas con un patrimonio "considerable". El ex criptomillonario también deberá llevar un brazalete electrónico de vigilancia y restringir sus viajes dentro y entre el Distrito Norte de California y los Distritos Sur y Este de Nueva York. Según el acuerdo, no puede realizar transacciones financieras por valor superior a 1.000 dólares, no puede abrir nuevas líneas de crédito, no puede salir de casa salvo para hacer ejercicio y debe someterse a tratamiento por abuso de sustancias y salud mental.
Bankman-Fried es el artífice de "un fraude de proporciones épicas", señaló al tribunal Nicolas Roos. Sin embargo, regresó voluntariamente a Estados Unidos, no tiene antecedentes de fuga y ha reducido significativamente sus activos financieros, añadió Roos.
Cabe señalar que Caroline Ellison, ex consejera delegada del brazo inversor de FTX, Alameda Research, y Gary Wang, el otro cofundador de FTX, se han declarado culpables de todos los cargos de fraude y cooperarán con el Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos en la investigación, según se conoció esta semana.