safemoon
Safemoon/Freepik

La empresa de criptomonedas SafeMoon se acogió este jueves al Capítulo 7 de las leyes de bancarrota en Estados Unidos, reconociendo deudas de entre 100.000 y 500.000 dólares con más de medio centenar de acreedores. La bancarrota ha sido declarada ante el Tribunal de Quiebras de Utah.

Las quiebras acogidas al Capítulo 7 dan lugar a la liquidación de los activos del deudor para pagar a los acreedores. Según los documentos judiciales, SafeMoon reconoce que sus activos están valorados entre unos 10 y unos 50 millones de dólares. A diferencia de las bancarrotas del Capítulo 11 a las que se han acogido otras empresas de criptomonedas como FTX, normalmente no hay intención de reestructurar y relanzar la empresa.

Esta declaración de bancarrota se produce un mes después de que la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés) acusara a la compañía, a su fundador Kyle Nagy, a su CEO John Karony y a su director de tecnología Thomas Smith, de violar las leyes de valores utilizando "un esquema fraudulento masivo". El regulador acusó a estos ejecutivos de malversar millones de dólares en activos de los inversores y de mentir a los usuarios.

Paralelamente, el token SFM de la compañía se ha desplomado por encima del 40%, aunque los expertos señalan que no es un activo especialmente líquido ni con una capitalización bursátil especialmente reseñable. Según datos de CoinGecko, SFM ha perdido prácticamente un 99% de su valor desde los máximos alcanzados en enero de 2022, cuando su capitalización bursátil alcanzó los 1.000 millones de dólares.

Cabe señalar que SafeMoon sufrió un ataque el pasado mes de marzo en el que se sustrajeron 8,9 millones de dólares.

Noticias relacionadas

contador