Las autoridades y reguladores vuelven a someter a un intenso escrutinio el mercado de las criptodivisas. Desde la presentación del la libra de Facebook varias voces han cargando duramente contra la iniciativa de la red social de Mark Zuckerberg, tanto es así que el responsable de este proyecto comparece este martes ante el Senado de EEUU para dar explicaciones sobre la nueva ‘cripto’ y Calibra, la entidad que la administra. Este hecho se producirá después de que el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, también haya alertado sobre las monedas de cifrado.
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Mnuchin se ha añadido al coro de detractores del bitcoin, del proyecto de criptografía del gigante de Internet y de otras criptomonedas, advirtiendo que representan un riesgo de "seguridad nacional" para el país. Es el último en una lista de representantes de las más altas estancias estadounidenses que se han pronunciado acerca del mercado de las monedas digitales. Opiniones contrarias que mantienen al bitcoin deprimido entre los 10.000 y los 11.000 dólares.
"Las criptomonedas como el bitcoin han sido explotadas para respaldar miles de millones de dólares en actividades ilícitas como delitos cibernéticos, evasión fiscal, extorsión, drogas ilícitas y tráfico de personas", señaló el secretario del Tesoro y agregó que libra de Facebook "podría ser utilizada por evasores de capitales y terroristas”. Haciéndose eco de las palabras del presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo que "no está cómodo" con los planes de Facebook para su criptomoneda privada.
El pasado miércoles fue precisamente Powell quien dio un paso al frente y trató de pararle los pies a Mark Zuckerberg. El banquero central estadounidense, envió un mensaje muy claro durante su comparecencia semestral ante el Congreso y le avisó de que “no podía seguir adelante” a no ser que afrontara las serias cuestiones regulatorias que se ciernen sobre libra.
El viernes, fue Trump quien cargo sobre la nueva moneda digital que debe ver la luz en 2020, aludiendo a los mismos problemas regulatorios que enunció Powell. El republicano, además, se declaró un “no fan” del bitcoin, ya que “se basa en la nada”. El mercado no reaccionó de forma inmediata, pero este lunes, el bitcoin se dejaba otro 10%, una depreciación que se añade a la acumulada la semana pasada y que ha dinamitado la capitalización total del mercado hasta los 290.000 millones de dólares.
La falta de dirección del bitcoin tras este vapuleo, que se halla atrapado en un rango más estrecho al que nos tiene acostumbrados, se explica porque “Los inversores no saben cómo encajar las noticias de que se incrementarán los niveles de escrutinio sobre las ‘criptos’”, explica Craig Erlam, analista de Oanda. No obstante, opina que con el tiempo, “si lo que se busca es una adopción masiva, esto sólo puede ser una buena señal”.
