Este miércolesvarios directores generales de las principales empresas de criptomonedas de Estados Unidos han comparecido ante el Congreso de EEUU y han presentado un frente unido para instar a los legisladores a proporcionar un marco regulador claro para las criptomonedas.
En la audiencia del miércoles, titulada "Los activos digitales y el futuro de las finanzas: Comprender los retos y los beneficios de la innovación financiera en Estados Unidos", el consejero delegado de Circle, Jeremy Allaire, el consejero delegado de FTX, Sam Bankman-Fried, el consejero delegado de Bitfury, Brian Brooks, el consejero delegado de Paxos, Chad Cascarilla, la consejera delegada de la Fundación para el Desarrollo de Stellar, Denelle Dixon, y Alesia Haas, directora financiera de Coinbase y consejera delegada de su filial en Estados Unidos, explicaron a los legisladores estadounidenses los retos a los que se enfrentan sus empresas como emisores de stablecoin y como bolsas de activos digitales.
La audiencia del comité de la Cámara de Representantes debatió sobre cuatro aspectos clave del espacio de las criptomonedas: los intercambios, las ofertas de stablecoin, las preocupaciones regulatorias en los activos digitales y las respuestas regulatorias federales. Asimismo discutieron sobre las finanzas descentralizadas, dado su potencial para "replicar y sustituir la prestación convencional de servicios financieros como préstamos, comercio de activos, seguros y otros servicios".
En una declaración escrita publicada antes de la audiencia, Allaire dijo que Circle apoyaba los esfuerzos del Congreso para "la concesión de licencias nacionales y la supervisión federal" de los emisores de stablecoin, dado que muchos eran ahora "demasiado grandes para ser ignorados." Cascarilla pareció hacerse eco de este sentimiento, describiendo el sistema financiero estadounidense como "inadecuado" para manejar la emergente economía digital, pero la tecnología blockchain puede ofrecer una posible solución
Brooks añadió que ya hay ejemplos de empresas involucradas en el espacio de los activos digitales que encuentran un entorno más favorable a la regulación en otros países, como Fidelity, que lanzó un fondo cotizado en bolsa de bitcoin (BTC) en Canadá a falta de la aprobación de la Comisión de Valores de Estados Unidos.