Choque de trenes en el espacio de las criptomonedas. El cofundador del ‘exchange’ Gemini, Cameron Winklevoss, ha acusado al CEO del conglomerado de empresas Digital Currency Group, Barry Silbert, de “tácticas dilatorias de mala fe” y de mezclar fondos de sus compañías, así como de negarse a devolver los más de 1.600 millones de dólares que el conglomerado adeuda, 900 de los cuales forman parte del programa Gemini Earn.
“Escribo esto en nombre de los más de 340.000 usuarios del programa Earn que buscan respuestas. Esta gente le confió más de 900 millones de dólares de sus activos a usted. Se merecen respuestas concretas y estamos aquí para conseguirlas”, ha escrito Winkevoss en una carta abierta publicada en su cuenta de Twitter. “Durante las últimas seis semanas, hemos hecho todo lo posible para comprometernos con usted de buena fe y de manera colaborativa con el fin de llegar a una resolución consensuada para que usted devuelva los 900 millones de dólares que debe, preservando al mismo tiempo su negocio”, ha añadido.
Earn Update: An Open Letter to @BarrySilbert pic.twitter.com/kouAviTho4
— Cameron Winklevoss (@cameron) January 2, 2023
El cofundador de Gemini se ha mostrado duro con Silbert, a quien acusa de “esconderse en su torre de marfil esperando que todo esto se olvide mágicamente” y de no responder a sus propuestas. “Para ser claros, este desaguisado es enteramente culpa suya. DCG debe a Genesis en torno a 1.675 millones de dólares. Usted tomó este dinero para alimentar codiciosas recompras de acciones, inversiones de riesgo ilíquidas y operaciones kamikaze con el valor neto de los activos de Grayscale que inflaron los activos bajo gestión generadores de comisiones de su fondo”, ha añadido.
El programa Earn de Gemini, que permitía a los particulares prestar sus activos digitales por un rendimiento esperado, lleva congelado desde mediados de noviembre en medio de una crisis de liquidez en Genesis y DCG que se desencadenó tras la quiebra de FTX. La filial de DCG Genesis Global Capital, el negocio de préstamos de Genesis Trading, suspendió los reembolsos y la concesión de nuevos préstamos en noviembre, poco después de que la compañía fundada por Sam Bankman-Fried solicitara la protección por quiebra.
DCG did not borrow $1.675 billion from Genesis
— Barry Silbert (@BarrySilbert) January 2, 2023
DCG has never missed an interest payment to Genesis and is current on all loans outstanding; next loan maturity is May 2023
DCG delivered to Genesis and your advisors a proposal on December 29th and has not received any response
La cosa no ha quedado ahí, ya que ha sido el propio Silbert quien ha respondido directamente a Winklevoss y ha subrayado que “DCG nunca tomó prestados 1.675 millones de Genesis”. “DCG nunca ha dejado de pagar intereses a Genesis y está al corriente de todos los préstamos pendientes”, ha añadido Silbert, quien ha señalado que “el próximo vencimiento del préstamo es en mayo de 2023”. Asimismo, ha asegurado que DCG entregó a Genesis y a sus asesores una propuesta el 29 de diciembre, la cual todavía no ha recibido ninguna respuesta.
La respuesta, lejos de contentar a Winklevoss, solo ha provocado más al cofundador de Gemini. “Ya estamos otra vez. Deja de fingir que tú y DCG sois espectadores inocentes y que no habéis tenido nada que ver con la creación de este lío. Es completamente falso”, ha criticado Winklevoss.
“Entonces, ¿cómo es que DCG le debe a Génesis 1.675 millones de dólares si no pidió prestado el dinero? Oh claro, ese pagaré... ¿Te comprometerás, o no, a resolver esto antes del 8 de enero de forma que el pagaré de 1.100 millones de dólares se considere como tal?”, ha añadido.
There you go again. Stop trying to pretend that you and DCG are innocent bystanders and had nothing to do with creating this mess. It's completely disingenuous.
— Cameron Winklevoss (@cameron) January 2, 2023
So how does DCG owe Genesis $1.675 billion if it didn't borrow the money? Oh right, that promissory note...
Cabe recordar que Digital Currency Group reconoció el pasado noviembre que la deuda total del grupo ascendía a 2.000 millones de dólares.