Las monedas digitales aguantan el tipo este jueves, a pesar del desplome del miércoles de Wall Street y de las réplicas en Asia y Europa. El bitcoin cae marginalmente, un 0,34% y en otras divisas criptográficas, las pérdidas no superan el 1,3%, mientras la capitalización total se sujeta sobre los 208.000 millones de dólares.
Las monedas de cifrado llevan varias jornadas consolidando el reciente declive, que fue justamente el 11 de octubre, coincidiendo con la anterior sesión negra de Wall Street. En aquella ocasión, la más operada de las ‘criptos’ cayó un 4%, mientras el XRP y el ethereum lo hicieron un 11% sólo durante la sesión asiática, según datos del comprador Coinmarketcap.
Pero en esta ocasión, la correlación no se ha producido y los activos virtuales sostienen sus precios, mientras sigue el debate sobre si habrá algún tipo de rally hacia finales de año que coloque el bitcoin por encima de los 8.000 dólares. De hecho, después de la oleada de ventas, siguió un rebote el 15 de octubre que impulsó al bitcoin hasta máximos de más de un mes. En un abrir y cerrar de ojos, la creación de Satoshi Nakamoto se enfiló hasta las inmediaciones de los 7.000 dólares, precios no vistos desde el 6 de septiembre. Desde entonces, ha cedido posiciones y ha vuelto a su rango sobre los 6.400 dólares.
BOLSAS DE TOKENS BASADOS EN VALORES
Los expertos toman ahora posiciones sobre la dirección del mercado en los próximos meses y no pocos coinciden que la siguiente frontera es lograr que el dinero institucional llegue a este floreciente mercado. Por ello afirman que el siguiente paso es convertir en tokens criptográficos los valores que se operan en las bolsas de todo el mundo.
Como si del dilema de la montaña de Mahoma se tratara, “el problema de las ‘criptos’ es que el dinero que se mueve en los mercados financieros no llega a este tipo de activos. Por este motivo hay que tender puentes con las bolsas tradicionales y acercar la inversión en tokens a los operadores de los parqués mundiales”, señala Malcolm Tan, presidente de Crowdbank.
Hasta la fecha, se han puesto en marcha una docena de iniciativas de brokers y bolsas de tokens valores en parqués de Boston, Barbados, Malta o Gibraltar. Y se estima que la conversión criptográfica de apenas un 1% de los activos tradicionales puede significar una inyección de 1 billón de dólares a la industria de las monedas digitales.