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El bitcoin (BTC) y las criptomonedas en general siguen este jueves con caídas moderadas aunque logran remontar casi todo el declive de la sesión del miércoles, cuando se evaporaron 15.000 millones del valor del bitcoin, en cuestión de minutos, tras el dato del IPC de EEUU, más fuerte de lo esperado, que incrementa los temores a una actuación más agresiva de la Reserva Federal (Fed). La lectura de junio alcanzó el 9,1%, la más alta en los últimos 41 años.
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La moneda digital por antonomasia se ha mostrado más débil esta semana y ha estado peleando por mantener el nivel de 20.000 dólares, después de que la semana pasada fracasara en consolidar los 22.000 dólares, una cifra que se considera psicológica, ya que los expertos aseguran que la verdadera zona de control se ubica por debajo de estos niveles, alrededor de 18.000 dólares y en los mínimos de mitad de junio. Este miércoles, y de la mano de caídas de alrededor del 4% en los índices de Wall Street, el BTC sucumbió por debajo de los 19.000 dólares, pero la marca de los 20.000 vuelve a estar en juego este jueves.
El ethereum mantiene un patrón similar y supera por poco los 1.100 dólares, tras ceder hasta la marca de 1.000 dólares. Este comportamiento más debilitado sigue a una acción del precio alcista la semana anterior, cuando casi tocó 1.300 dólares. El resto de 'altcoins' están casi planas este jueves y la capitalización total ronda los 900.000 millones de dólares tras tocar 850.000 dólares el miércoles.
El bitcoin ha sido incapaz hasta ahora de actuar como cobertura contra la inflación, ha experimentado una considerable pérdida de valor este año, desplomándose alrededor de un 72%. Junto con otros activos de riesgo, el Bitcoin se ha visto gravemente afectado por las políticas monetarias de la Reserva Federal porque siempre ha existido en un entorno de tipos de interés bajos.
Desde el punto de vista del análisis técnico, la moneda digital se acerca a la directriz alcista dibujada con los mínimos crecientes. "Lo más normal es que estemos ante una figura de continuación bajista", comenta César Nuez, analista de Bolsamanía. "La reacción al desplome del mes de junio está siendo muy débil. Esto es una muestra de la debilidad actual de las compras lo que inclina la balanza para que podamos acabar viendo un ataque a los mínimos anuales que dibujara en las inmediaciones de los 17.600 dólares", prosigue.
"Si los pierde es muy probable que podamos ver una extensión de las caídas hasta el nivel de los 12.000 dólares. Sólo veríamos una señal con la superación de la resistencia de los 23.000 dólares", redondea.
