Durante el convulso mes de julio, en que los mercados se han visto sacudidos por los rebrotes del Covid, las tensiones entre EEUU y China y la ralentización de la recuperación económica, unos pocos activos han brillado con luz especial. Además del oro y del euro, que han protagonizado rallys que podrían ampliarse en agosto, el podio lo corona la reina de las criptodivisas, el bitcoin, que ha avanzado un 25%, ha superado con holgura resistencias y tiene todos los boletos para acabar erigiéndose como la gran inversión del verano, si la volatilidad y la incertidumbre lo permiten.
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Pero antes de que los inversores favorecieran a la creación de Satoshi Nakamoto, la crisis del coronavirus sacudió y mucho el mercado de las criptomonedas, donde el bitcoin o el ethereum tuvieron descensos por encima del 60 y 67% respectivamente. “Los especuladores se deshicieron de sus posiciones ante los momentos de pánico que existían en todos los activos”, comenta Diego Morín de IG Markets
No obstante, la recuperación que han tenido ambas divisas de cifrado ha sido de las más espectaculares dentro del mundo de las criptomonedas, con la primera subiendo más de un 180% desde los mínimos de marzo, mientras que la segunda ha recuperado más de un 360%, “debido a la fuerte especulación de los inversores institucionales”, comenta el analista.
Si bien el pasado fin de semana se vio una corrección en estos activos, los expertos señalan que la carrera alcista esta vez es distinta a las anteriores, ya que se cotiza bajo la premisa de una cobertura, en un mercado extremadamente tumultuoso, que ha visto el mayor colapso desde la II Guerra Mundial. Además, se da la circunstancia de que a mediados de mayo se produjo el 'halving', el recorte a la mitad en la recompensa de bloque minado, lo que lleva a una escasez en el bitcoin que, per se, eleva la demanda. Después de cada rebaja de las nuevas unidades que se minan provoca una explosión en los precios pasados unos meses y esta vez no iba a ser diferente, aseguran los analistas.
"El volumen negociado real en las distintas casas de bolsa se ha visto incrementado de forma significativa estas últimas semanas. Esto significa que existe cierto fundamento entre alza de precios y entrada de fondos", explica por su parte Javier Molina, portavoz de eToro en España. "Una parte de esos jugadores se entiende son institucionales o profesionales en lo que significa mayor adopción y consistencia en el movimiento", explica. Asimismo, este experto señala que "se ha producido un aumento del interés abierto en los mercados de derivados organizados, tanto el Chicago Mercantile Excahnge (CME) como Bakkt, en sintonía con lo comentado anteriormente".
¿A POR LOS 15.000 Y LOS 500 DÓLARES?
Así pues tras la vacilación de todo 2020, el consenso es que, al menos, ahora toque los 15.000 dólares. La cripto arrancó el año con fuertes movimientos del precio hasta marzo, desde los 7.000 dólares hasta alcanzar la resistencia principal de los 10.500 dólares, nivel que rechazó. A medida que avanzaba el Covid-19 por China, los inversores comenzaron a desprenderse de posiciones y tras expandirse por Europa, la caída fue brusca, haciendo un mínimo en los 4.000 dólares, soporte clave para el Bitcoin.
“Finalmente, la recuperación del precio y el posterior cierre por encima de los 6.700 dólares, coincidió con la rotura de la media de 50 sesiones, donde realizó un apoyo y se impulsó en busca de los 10.000 puntos. Por tanto, si el mercado sigue respetando los 10.000 y 11.000 dólares, es probable que intente perforar la resistencia de los 14.500 dólares”, aventura Morín.
Con respecto al ethereum, la situación se asemeja a la del llamado ‘oro digital’, con una fuerte caída durante la propagación del coronavirus a nivel mundial. Por ello, el precio llegó a perforar el soporte de los 115 dólares, “aunque podemos ver cómo el mercado respetó fuertemente dicho nivel”, indica el analista de IG Markets.
Asimismo, el mercado comenzó a recuperar terreno a medida que los bancos centrales trasladaron calma a las economías con las inyecciones de liquidez, y “donde el ethereum se hizo fuerte al consolidar la zona de los 140 dólares, coincidiendo con el cierre por encima de la media de 50 sesiones”, prosigue.
Finalmente, durante el mes de junio, el mercado estuvo bastante lateral, entre los 200 y 250 dólares, y “no fue hasta el pasado 22 de julio cuando el fuerte volumen generado en la sesión dio impulso al precio, subiendo más de un 63% hasta el día de hoy. Por tanto, tendremos que vigilar que el mercado no pierda el nivel de los 300 dólares, ya que de sostenerlo, podrías tener un testeo en el nivel de los 460 dólares”, asegura el analista.