Las noticias de que Elon Musk, consejero delegado de Tesla, ha dado marcha atrás y ha vuelto a proponer la compra de Twitter por 54,20 dólares por acción (44.000 millones de dólares), han sacudido Wall Street, disparando las acciones de la red social y arrastrando otros valores en su subida. El mercado de las criptomonedas, sensible a los movimientos de Musk, no se ha quedado al margen y ha dejado notar su entusiasmo en el dogecoin (DOGE), el token digital con el que el magnate mantiene un largo idilio.
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Twitter se desmelena y ataca niveles clave del medio y largo plazoLa especulación sobre una posible integración del ‘criptomeme’ en la red social de ‘microblogging’ había provocado anteriormente subidas en la moneda parodia de la imagen de un perro de la raza shiba inu. El renovado interés del dueño de la firma de coches eléctricos en cerrar la transacción contemplada en el acuerdo de fusión del 25 de abril de 2022 con los dueños de Twitter ha vuelto a dar alas al DOGE, que cerró la jornada del martes con alzas del 10%. Pese a que el miércoles cerró más de un 1% abajo, acumula en la semana una ganancia del 8%.
El entusiasmo obedece a que el dogecoin ya es aceptado por Tesla para el pago de mercancías. Además, Musk ha hecho gala de su preferencia por esta moneda digital repetidamente, mediante apuntes en la red social que ahora quiere comprar que han tenido un fuerte impacto en el precio. Los fans de este token esperan, por tanto, que llegue a Twitter de una forma u otra, bajo el impulso del nuevo jefe de la red social.
La relación de amor entre ambos se remonta a 2019, desde que Musk tuiteó por primera vez sobre el DOGE. “Dogecoin podría ser mi criptomoneda favorita”. "Es genial”, dijo. Se cree que ha estado trabajando junto a sus desarrolladores desde entonces e incluso se ofreció a ayudar a financiar un mayor desarrollo de la red, lo que los fundadores declinaron.
Sin embargo, el equipo del DOGE ha hecho caso a los consejos de Musk para intentar aumentar las transacciones por segundo (TPS) en la red del Dogecoin y hacer que sea más eficiente energéticamente. Desde su creación en 2013 por el ingeniero de software de IBM Billy Markus y el ingeniero de software de Adobe Jackson Palmer, como una broma, la 'cripto' se basa en el modelo de consenso de prueba de trabajo ('proof of work').
Esto se ha convertido en un gran problema para las cadenas de bloques de criptomonedas como el bitcoin, ya que los mineros utilizan una enorme cantidad de potencia informática para resolver los rompecabezas criptográficos para ganar nuevos tokens. El elevado consumo energético que requieren es muy criticado por su impacto medioambiental.
De hecho, varios medios han apuntado recientemente que Dogecoin planea la transición de la red al modelo de prueba de participación ('proof-of-stake'), al igual que ha hecho Ethreum recientemente. Este mecanismo de consenso implica que los propietarios de la criptomoneda bloquean sus tokens en la red mediante un proceso llamado 'staking', lo que les convierte en validadores y les permite aprobar las transacciones y crear nuevos bloques y tokens.
Se especula con que Musk es el impulsor de estos cambios, ya que en el pasado ha expresado su preocupación por las emisiones contaminantes de las cadenas de bloques como la del bitcoin y el dogecoin. De hecho, este es el motivo por el que dio marcha atrás en 2021 en sus planes de aceptar el bitcoin como medio de pago.
EL DOGECOIN EN TWITTER
Esta larga relación entre el fundador de Tesla y el DOGE podría hallar en Twitter una nueva forma de expresión. Las grabaciones de las conversaciones telefónicas de Musk que se hicieron públicas en el período previo a la demanda contra Twitter revelaron varias de las ideas de Elon Musk para la red social.
"Tengo una idea para un sistema de medios sociales de blockchain que hace tanto pagos como mensajes de texto cortos/enlaces como Twitter. Hay que pagar una cantidad ínfima para registrar el mensaje en la cadena de bloques, lo que eliminará la gran mayoría del spam y los bots. No hay ninguna garganta que ahogar, así que la libertad de expresión está garantizada", dijo Musk, según las grabaciones citadas por 'Techcrunch'.
El jefe de Tesla amplió su idea, mencionando específicamente al dogecoin: "Mi plan B es una versión de Twitter basada en la cadena de bloques, en la que los tuits están incrustados en la transacción de los comentarios", dijo a Steve Davis, presidente de The Boring Company. "Así que tendrías que pagar quizás 0,1 dogecoins por comentario o reenvío de ese comentario".
Está por ver ahora si el multimillonario pondrá en práctica estos planes. No está claro cuántos dogecoins posee Elon Musk, pero se ha especulado con que podría ser la ballena que tiene más de 36.000 millones de monedas. Y desde luego eso le convierte en el mayor beneficiario de toda esta especulación.