El cofundador de la plataforma de intercambio de activos criptográficos FTX, Sam Bankman-Fried, ha acudido este pasado martes a un tribunal de Manhattan para enfrentarse a un juicio por fraude y conspiración tras el colapso de la empresa.
Bankman-Fried, exconsejero delegado de la empresa, se declaró no culpable en marzo de cargos de fraude y conspiración por el colapso de FTX, que se acogió a la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos por deber a sus 50 mayores acreedores casi 3.100 millones de dólares (2.919 millones de euros).
El juicio está presidido por el juez Lewis Kaplan. El multimillonario permanecía bajo arresto domiciliario con un brazalete electrónico en casa de sus padres en Palo Alto, California, tras pagar una fianza de 250 millones de dólares (235 millones de euros).
La solvencia de FTX había quedado en entredicho después de que su rival Binance decidiera dar marcha atrás en su intención de acudir al rescate de la plataforma tras haber realizado la diligencia debida y ante la apertura de investigaciones por agencias gubernamentales en Estados Unidos.
Las autoridades de Bahamas anunciaron el 13 de diciembre el arresto del fundador de FTX, tras una "notificación" de Estados Unidos sobre la presentación de cargos contra él, país al que fue extraditado días después bajo custodia del FBI.