El colapso de FTX ha puesto en alerta al Banco de España (BdE). El supervisor bancario nacional ha echado el freno en la inscripción de ‘exchanges’ y plataformas de criptomonedas después de un verano intenso de registros.
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El abogado de FTX admite que una "cantidad sustancial" de activos han sido robadosEl organismo lanzó a finales de 2021 el registro público de proveedores de cambio de moneda virtual por fiduciaria y/o custodia de monederos electrónicos, un registro que no establece normas de supervisión financiera, prudencial, gobierno corporativo, seguridad tecnológica ni de conducta de mercado o transparencia informativa. El Banco de España no supervisa, por ejemplo, los riesgos financieros u operativos y de seguridad de estos negocios ni tiene ninguna competencia en materia de conducta sobre estos proveedores.
En el registro ya están inscritas unas 46 compañías entre las que destacan Bit2Me, participada por Telefónica, Onyze o la británica Bitstamp, registrada el pasado 7 de octubre y una de las últimas compañías en entrar en este listado.
Una treintena de compañías entraron en el listado del BdE entre junio y septiembre, aunque el ritmo se ha reducido significativamente en los últimos dos meses. Desde octubre, solo seis proveedores han entrado a formar parte de este registro: Vent Finance, Alejandro Estrella Casada, Kriptomat, AlphaGrowth, Atani y la ya mencionada Bitstamp. Ninguna de estas altas se produjo en noviembre.
Entrar en el registro del BdE no es obligatorio. Buena parte de los proveedores solicita su alta en el listado para demostrar su transparencia y buena fe, al tiempo que esta autorización supone una mejor carta de presentación de cara a inversores institucionales y clientes, especialmente en un contexto en el que todavía no existe regulación.
Aunque la quebrada FTX no está en la lista del BdE, ya que no opera en España, su caída sí ha provocado que el mercado tema un efecto contagio que se expanda a otras plataformas del espacio de las criptomonedas. “Esperamos que los episodios que hemos vivido sirvan para que los ciudadanos tomen conciencia de los riesgos asociados a estos criptoactivos”, señaló el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, la pasada semana al ser preguntado por el fallido ‘exchange’.
Una de las empresas más afectadas por estos temores ha sido el bróker de activos digitales Genesis, que está teniendo dificultades para obtener la liquidez necesaria para mantener la viabilidad de la compañía, aunque ha negado públicamente que vaya a declararse en quiebra. Coinbase y Crypto.com tampoco están pasando por su mejor momento tras la implosión de FTX.
En cuanto al quebrado ‘exchange’, el abogado de FTX en el caso de bancarrota ante el tribunal de quiebras de Delaware ha reconocido que la plataforma sigue siendo objeto de ciberataques y que muchos de sus activos han sido robados o se encuentran en paradero desconocido.
Asimismo, el nuevo CEO de la compañía, John J. Ray III, ha criticado duramente a la antigua cúpula directiva y ha señalado que la quiebra es peor que la de Enron, la cual también supervisó. “Nunca en mi carrera he visto un fracaso tan completo de los controles corporativos y una ausencia tan completa de información financiera fiable como ha ocurrido aquí. Desde la integridad comprometida de los sistemas y la defectuosa supervisión reguladora en el extranjero, hasta la concentración del control en manos de un grupo muy pequeño de individuos inexpertos, poco sofisticados y potencialmente comprometidos, esta situación no tiene precedentes”, aseguró Ray.