El 23 de julio de 2012 una nube de plasma o “CME” se disparó desde el Sol acercándose peligrosamente a la Tierra pudiendo haber ocasionado desastres como apagones eléctricos generalizados o la anulación de las redes GPS y de comunicación.
Según los científicos de la NASA, la Tierra se acercó peligrosamente a una tormenta solar eyectada desde el Sol a más de 3.000 kilómetros por segundo, más de cuatro veces más rápido de lo normal. Estos científicos afirman que es la mayor tormenta solar registrada, y podría haber causado apagones generalizados, la desactivación de todo lo que se pueda conectar a un enchufe de pared.
“Si hubiera golpeado -en la Tierra-, todavía estaríamos recogiendo los pedazos” añade Daniel Baker, de la Universidad de Colorado, en una charla de nombre “La mayor erupción solar en julio de 2012: Definición de escenarios con climas extremos”. En cambio, la tormenta sí llegó a la nave espacial STEREO-A.
La tormenta solar más potente registrada hasta la fecha era la conocida como Carrington Event, que se dio cita en el siglo XIX cuando la tecnología de la época era poco susceptible a las perturbaciones electromagnéticas. En la sociedad actual, que es profundamente dependiente de tecnologías sensibles al Sol, como el GPS, las comunicaciones por satélite e Internet. Si en vez de haber alcanzado el satélite STEREO-A hubiera llegado a la Tierra, estaríamos montando a caballo, sin móviles, sin ordenadores, sin luz en casa... nos hubiera llevado a la Edad Media.