La guerra entre Andrea Orcel y Banco Santander tendrá que resolverse en los juzgados. La entidad y el banquero italiano no han conseguido llegar a un acuerdo para evitar el juicio por el que se decidirá quién tiene la razón: Ana Botín u Orcel, quien denunció al considerar que el banco incumplió el compromiso de contratarle como consejero delegado en 2019.
- 4,329€
- -0,64%
El italiano pide al banco español que le nombre consejero delegado o le compense con 112 millones de euros, según una información publicada en Expansión. Actualmente, Orcel está pendiente de ser nombrado consejero delegado de UniCredit, a la espera de recibir el visto bueno en la junta general de accionistas, que se celebrará el próximo 15 de abril.
El Juzgado de Primera Instancia número 46 de Madrid ha fijado para el próximo 10 de marzo el juicio por la disputa fraguada en 2018.
Hay que recordar que Santander hizo público el nombramiento de Andrea Orcel, antiguo directivo de UBS, en septiembre de 2018. Cuatro meses después, y en una decisión sorprendente, anunció que daba marcha atrás. La entidad ha alegado en todo momento que su decisión se debió a la demandas económicas de Orcel y a su fracaso a la hora de hacer "todos los esfuerzos posibles" para reducir el coste que su nombramiento suponía para el banco.
"Como banco comercial, teníamos que sopesar el alto coste de contratar a un profesional, aunque sea alguien del talento de Andrea Orcel, a quien había que compensar la pérdida de siete años de salario diferido, con nuestra cultura corporativa, que implica compromiso y responsabilidad con nuestros empleados, clientes y accionistas. Por eso, el consejo y yo misma, estamos convencidos de que, pese a que resulta una decisión difícil, hemos tomado la correcta", señaló entonces la presidenta del banco a través de un comunicado.