El Banco Central Europeo (BCE) ha exigido a los grandes bancos europeos que lleven a cabo planes de contingencia especiales contra el coronavirus para garantizar sus operaciones, según ha adelanto El Independiente.
El organismo se ha puesto en contacto con más de 100 entidades financieras europeas, la mayoría españolas, para que aclaren las medidas que van a llevar a cabo para hacer frente la situación que se está viviendo por la expansión del virus y evitar que se produzca con colapso en el sistema financiero comunitario.
La carta enviada, firmada por Andrea Enria, presidente del consejo de Supervisión del BCE, explica que “a la luz de los riesgos identificados se espera que las instituciones tomen las acciones apropiadas para preparase y responder a una potencial pandemia”.
En España, esta petición del BCE la han recibido Santander, BBVA, Bankia, CaixaBank, Sabadell, Bankinter, Libernbank, Kutxabank, Unicaja, Ibercaja, Abanca y Banco de Crédito Social Corporativo. En total han sido 117 bancos los que han recibido el aviso.
Entre las medidas que deben llevar a cabo destaca que los bancos han de demostrar que pueden mantener sus actividades de atención a los clientes, de continuar con sus operaciones, que pueden operar si se toma la decisión de teletrabajar o que podrán seguir rellenando de efectivo sus cajeros.
Noticia relacionada
La Fed recorta los tipos de interés 50 puntos básicos por el impacto del coronavirusEs el primer movimiento que se produce en el BCE ante la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Se ha producido justo después de que la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) haya recortado por sorpresa los tipos de interés 50 puntos básicos. La entidad no realizaba un recorte de emergencia desde la crisis financiera de 2008.
Igualmente, el FMI se ha comprometido esta tarde a proporcionar "el apoyo necesario para mitigar el impacto" económico y financiero a nivel mundial.
Para ello, se plantean desembolsar hasta 50.000 millones de dólares a través de sus facilidades de financiamiento de emergencia para ayudar a los países de bajos ingresos y mercados emergentes que no requieren programas completos del FMI.