MARACENA (GRANADA), 13 (EUROPA PRESS)
El Centro Municipal de Información de la Mujer de Maracena, en el área metropolitana de Granada, ha solicitado a los Ministerios de Presidencia y de Asuntos Exteriores protección para los hijos de Juana Rivas, vecina de este municipio, en coordinación con Italia, lugar donde residen y deben estar de vuelta este jueves 15 de agosto, tras el periodo vacacional estipulado con su madre en España.
Así consta en sendas cartas, a las que ha tenido acceso Europa Press, remitidas este martes por la directora del Centro Municipal de Información de la Mujer, Francisca Granados; a la vicepresidenta y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, Carmen Calvo; y al ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Josep Borrell.
Piden al Gobierno que se adopten en Italia "las medidas cautelares que, a fecha de hoy, no se han adoptado en España; las cuales permitan la protección de los niños desde el mismo día 15 de agosto, impidiendo la entrega al padre", el italiano Francesco Arcuri, "hasta tanto no se hayan culminado las investigaciones en curso".
En este sentido, se alude a la necesidad de "apoyo y acompañamiento consular" a los menores, de 13 y cinco años, y a la propia Rivas, que está condenada a cinco años de prisión por sustracción de menores tras no entregar en 2017 a sus hijos alegando una supuesta situación de maltrato.
El objetivo sería hacer "valer en dicho país los informes clínicos de riesgo emitidos por el Sistema Sanitario Público Español" y que las autoridades españolas soliciten "de oficio" las medidas "de protección acordes con la gravedad de la situación detectada".
"El interés superior de los menores" presente en el ordenamiento jurídico español y el derecho internacional "no puede quedar suspendido por ninguna frontera, ni geográfica ni política", concluyen estas cartas.
Estas misivas se han hecho llegar al Gobierno una vez que, este mismo martes, la Audiencia Provincial ha denegado medidas cautelares sobre los hijos de Juana Rivas, respaldando así el auto del Juzgado de Instrucción número 3 de Granada ante el que la madre de Maracena presentó una denuncia frente a su expareja, el italiano Francesco Arcuri, por presunto delito de maltrato, lesiones y amenazas de muerte hacia los menores.
Confirma de este modo la decisión adoptada anteriormente por el Juzgado de Instrucción, incidiendo en la "incompetencia de la jurisdicción española" para abordar "en el orden penal" los hechos denunciados y adoptar las medidas cautelares solicitadas en la denuncia.