China ha retrasado la publicación de algunos de los esperados indicadores económicos que debían conocerse este martes, como la lectura del PIB del tercer trimestre, de forma indefinida, según ha comunicado la Oficina Nacional de Estadísticas del gigante asiático.
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La noticia llega en medio del XX Congreso Nacional del Partido Comunista de China, que comenzó este pasado domingo y que se extenderá hasta el sábado 22, en el que se espera que el actual presidente chino, Xi Jinping, consolide un inédito tercer mandato al frente del partido desde la muerte de Mao Zedong en 1976, al tiempo que traza la línea política y económica de China en los próximos años.
Se espera que los datos económicos pongan de manifiesto las continuas debilidades económicas de China, incluido el agravamiento de la crisis inmobiliaria y el impacto de las estrictas políticas de "Covid cero" del Ejecutivo chino, unas medidas que han bloqueado grandes ciudades como Shanghái o Shenzhen, golpeado con fuerza el consumo y aislado al país del resto del mundo.
El mercado estima que el PIB chino crecerá un 3,4% en el tercer trimestre de 2022. Entre abril y junio, la economía de china se expandió únicamente un 0,4% en comparación con el mismo período del año anterior, lo que provocó que aumentaran los pronósticos de que China no alcanzaría el objetivo de crecimiento del 5,5% marcado para este año, uno de los más bajos en las últimas décadas.
“Es probable que se trate de ocultar el ruido que podrían generar estas estadísticas. Con el XX congreso del partido en marcha, podría dar un mensaje mixto o una señal incorrecta a los mercados y hacer que las cosas sean volátiles”, explica Iris Pang, economista jefe de ING para China, en declaraciones recogidas por ‘Financial Times’.
En este sentido, cabe señalar que Xi inauguró el cónclave del Partido Comunista de China con un discurso en el que subrayó la necesidad de promover un crecimiento de “mayor calidad” y de conseguir la autosuficiencia nacional. "Sin bases materiales y tecnológicas sólidas no podemos esperar construir un gran país socialista moderno", aseguró Xi este domingo, al tiempo que apuntó que China "aprovecharía mejor el papel fundamental del consumo para estimular el crecimiento económico".
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A su vez, la agencia de planificación económica, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, ratificó este cambio en los objetivos de crecimiento del país, que pasará “de un período de crecimiento de alta velocidad a uno de alta calidad”. “También nos enfrentamos a una nueva situación para atraer la inversión extranjera”, aseveró Zhao Chenxin, vicepresidente de la Comisión y alto cargo del Partido Comunista.
Según recoge ‘CNBC’, Zhao señaló que China fomentará la inversión extranjera en la fabricación avanzada, los servicios de mayor calidad, la alta tecnología, la conservación de la energía y la protección del medio ambiente. También señaló el apoyo específico a este tipo de inversiones en las zonas central, occidental y nororiental de China, las regiones menos desarrolladas del gigante asiático.
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