- Tras dos años y medio en la presidencia, la acción cotiza por debajo de 7 euros
- -0,028€
- -0,71%
Octubre de 2007. Justo antes del estallido de la crisis financiera en Wall Street, Telefónica alcanza los 100.000 millones de euros de valor en bolsa, por encima de 21 euros por acción. Han pasado 11 años y la operadora de telecomunicaciones apenas vale 34.000 millones de euros y cotiza por debajo de 7 euros. Es decir, ha perdido el 66% de su valor.
Una crisis eterna que parece no tener fin, pese a los esfuerzos de un José María Álvarez Pallete que no logra detener la sangría bursátil, pese a las numerosas iniciativas planteadas desde que llegó a la presidencia, hace ahora dos años y medio.
El aumento de la competencia en su mercado de origen y el fracaso en la venta de O2 en Reino Unido, seguido del proceso interminable para sacar a bolsa o vender este activo, han sido dos de los principales lastres para la compañía, junto a la losa que supone el elevado endeudamiento del grupo.
Desde Renta 4, consideran “positivos” los esfuerzos de Pallete para reducir deuda. “Telefónica logró reducir en el segundo trimestre la deuda neta por quinto trimestre consecutivo hasta 43.593 millones de euros”, señala el analista Iván San Félix. Esto equivale a 2,7 veces el EBITDA esperado por Renta 4 para 2018.
PROBLEMAS PARA MONETIZAR ACTIVOS
A finales de julio, Telefónica llegó a un acuerdo con Pontegadea, el vehículo inversor de Amancio Ortega, para vender el 10% de su filial de infraestructuras Telxius por 378 millones de euros. Sin embargo, la venta se realizó “a un múltiplo muy por debajo de las últimas transacciones en el sector de infraestructuras de telecos”, según destaca San Félix.
Y aquí radica uno de los grandes problemas de Pallete. Pese a tener a la venta múltiples activos como O2 en Reino Unido o haber confirmado su objetivo de sacar a bolsa Telefónica Argentina, la empresa no consigue monetizarlos de una manera eficiente para reducir deuda y centrarse en sus mercados estratégicos, especialmente Brasil y España.
La crisis de Argentina ha sido la última piedra en el zapato de Pallete para intentar reconducir la situación. El desplome del peso ha asustado a los inversores, que han deshecho posiciones en todos los activos relacionados con el país presidido por Mauricio Macri.
Desde Bankinter, recuerdan que “la desinversión en O2 sería clave”, ya que “podría traducirse en una inyección de fondos” que calculan entre “3.000 y 4.000 millones de euros por una participación alrededor del 40%”.
Estos analistas muestran su confianza en “el giro estratégico” dado por Pallete, que incluye los acuerdos “con Netflix y Amazon y la adquisición del 100% de los derechos del fútbol” en España. Pero el mercado no lo valora de la misma forma.
Con las acciones en mínimos de 16 años, Pallete debe encontrar la fórmula para evitar la evidente destrucción de valor para los accionistas de Telefónica. Desde que llegó a la presidencia en abril de 2016, muchos han sido sus esfuerzos para impulsar la acción, pero ninguno ha tenido éxito. Y la paciencia de los grandes accionistas no es infinita.