En las últimas sesiones AXA ha estropeado su buen aspecto técnico al abandonar el soporte de los 23,57 euros. Esto ralentiza su escalada alcista que en los últimos meses se había acelerado y que nos hizo pensar en un ataque a los máximos de 2015 que presenta en los 26 euros.
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No obstante, no ha sido así y la compañía del CAC 40 se toma un descanso y probará la banda de soporte que presenta en las inmediaciones de los 22 euros. Podríamos ver unos descensos incluso hasta el nivel de los 21 euros, niveles en donde se encuentra la media de 200 sesiones, sin que apreciemos una complicación de sus perspectivas técnicas. Para volver a ver a una señal de fortaleza deberíamos esperar a que la cotización de la compañía consiguiera subirse por encima de los 23,83 euros, máximos del pull back realizado al soporte abandonado de los 23,57 euros.
