Apple ha caído un 4,8% en bolsa tras sufrir el segundo recorte de valoración por parte de Goldman Sachs en apenas una semana. Si el pasado 13 de noviembre el banco estadounidense rebajaba su precio objetivo hasta 209 dólares desde $220, este martes el recorte es aún mayor, del 13%, hasta 182 dólares desde los anteriores $209. En total, la entidad financiera ha bajado su valoración un 17%.
Las acciones de Apple caen hasta 176,9 dólares y se desploman cerca de un 24% desde su máximo histórico, marcado el pasado 3 de octubre en 233,47 dólares. Una caída del 20% en cualquier activo es definida como una entrada en mercado bajista ('bear market').
Goldman Sachs recortó la valoración de Apple por primera vez después de que uno de sus proveedores, Lumentum, lanzara un profit warning al esperar una menor demanda de pedidos de uno de sus grandes clientes. Por ello, recortó un 6% su previsión para la venta de iPhones en 2019.
Ahora, el banco justifica el nuevo recortó tras la información lanzada este lunes por The Wall Street Journal (WSJ). El rotativo neoyorquino publicó que el grupo dirigido por Tim Cook ha recortado "los pedidos de producción de sus tres últimos modelos de iPhones", lo que ha creado graves problemas a varios de sus suministradores.
WSJ añadió que la demanda por debajo de lo esperado para los nuevos dispositivos, junto a la mayor oferta de modelos, han creado "una gran confusión" en la cadena de suministro y ha hecho "más difícil" calcular la cantidad necesaria de componente y dispositivos.
Las previsiones han sido particularmente problemáticas para el modelo iPhone XR, ya que Apple ha tenido que recortar los pedidos de este smartphone en un tercio desde los 70 millones de unidades encargados inicialmente.
FACTORES DE DEBILIDAD
Ahora, Goldman afirma que "la inesperada caída de la demanda en China, junto a la renovada fortaleza del dólar", son dos problemas para la compañía que eran "difíciles de predecir".
Además, los expertos de la entidad observan un deterioro en el poder de Apple para "fijar los precios" del iPhone, ya que este poder de fijación de precios estaría "al límite" para el célebre dispositivo. Y cuando esto sucede, la compañía que sufre este fenómeno reduce sus márgenes, reduce su cuota de mercado o ambas cosas.
DURO CASTIGO PARA EL VALOR
Desde que el fabricante del iPhone presentó resultados y anunció que no desglosará las ventas de sus dispositivos, el mercado ha castigado duramente a la compañía dirigida por Tim Cook.
La desconfianza de los inversores se vio acrecentada después de que, por primera vez en 10 años, Apple confirmara que a partir de ahora no desvelará las cifras concretas de iPhones vendidos. Tampoco lo hará con las de sus ordenadores Mac o sus tabletas iPad.
Una decisión que el mercado ha entendido como una manera de encubrir el estancamiento en ventas y que tuvo su reflejo en una información publicada por la prensa asiática posteriormente. Según The Nikkei Asian Review, "Apple ha cancelado un aumento de producción para el iPhone XR" que tenía previsto, debido a que la demanda del nuevo dispositivo ha sido inferior a lo esperado.