Correcciones puntuales aparte, lo cierto es que todo apunta a que más pronto que tarde el índice estadounidense se coloque en subida libre absoluta
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Este miércoles el S&P 500 cerraba ligeramente por encima de los 3.000 puntos. O lo que es lo mismo, le tenemos a menos de un 1% de los máximos históricos intradía en los 3.027,98 puntos. En el gráfico semanal podemos apreciar los impecables mínimos crecientes desde diciembre, así como una recta resistencia prácticamente horizontal en el rango de precios de entre los 3.015-3.030 puntos. Y la experiencia nos dice que en la mayoría de las ocasiones el precio termina rompiendo por el lado más horizontal, en este caso la parte de arriba. En cualquier caso, las bolsas europeas y sobre todo las de Wall Street sigen fuertes, muy fuertes. Y salvo sorpresas da la sensación de que en cualquier momento el principal índice bursátil mundial puede colocarse, por enésima vez, en subida libre absoluta. Aunque para ello ha de confirmar en precios de cierre por encima de los 3.030 puntos en números redondos.