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A la vista del gráfico semanal del que es el segundo banco galo podemos decir que estamos ante un momento de lo más interesante para intentarlo de nuevo por el lado alcista.
De hecho, tenemos a los títulos de Société Générale agarrándose como ‘a un clavo ardiendo’ al soporte que presenta en los 35 euros, referencia en la que se ha frenado en varias ocasiones y que a su vez se corresponde con un ajuste/retroceso del 61,8% de Fibonacci de toda la última gran subida.
De manera, que la estrategia es sencilla. Abrir largos en los actuales niveles de precio (aunque cuanto más cerca del soporte mejor que mejor) con un stop loss en precios de cierre y en velas semanales por debajo de los 34,80 euros (que son los mínimos anuales). Y objetivos de subida en la resistencia de los 38,50 euros y por encima, incluso, los 40 euros.
A principios de agosto la entidad gala anunciaba un beneficio neto, mejor de lo esperado, correspondiente al segundo trimestre y anunciaba que acordó vender negocios en Bulgaria y Albania a OTP Bank. El banco registró un beneficio neto de 1.160 millones de euros durante el periodo, frente a los 1.060 millones de euros del año anterior.
Los ingresos bancarios netos, la cifra más alta de ingresos del banco, fueron de 6.450 millones de euros, frente a los 5.200 millones de euros del año anterior, cuando se vio afectado por un cargo de 963 millones de euros para resolver un litigio relacionado con transacciones en Libia. Sobre una base subyacente, que excluye las partidas excepcionales, el ingreso bancario neto creció 1%, dijo el banco. El banco francés señaló además que había acordado vender sus participaciones mayoritarias en el Banco Express de Bulgaria y Société Générale Albania a OTP Bank.