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Tal y como hemos repetido una y otra vez, en la medida en que nuestro índice no supere los 9.671 puntos no hay nada que hacer.
Durante todo el mes de septiembre y, sobre todo, a lo largo el importante rebote (del 6%) que tuvimos en nuestro índice hasta el último gran vencimiento de futuros (finales de septiembre) comentamos por activa y por pasiva aquello de que "en la medida en que no se superara la resistencia de los 9.671 puntos todo seguiría igual, nada cambiaría de forma significativa". Y lo cierto es que seguimos en la misma situación, inmersos dentro de un impecable tendencia bajista (máximos y mínimos decrecientes). De hecho, el último rebote se ha quedado a sólo seis puntos de los máximos de mediados de agosto, la sempiterna resistencia de los 9.671 puntos. Por lo tanto, el Ibex 35 nos ha construido un sexto máximo decreciente desde el pasado mes de mayo.
Y ahora estamos luchando por no perforar los 9.300 puntos, los mínimos de la sesión del viernes pasado. En teoría, por debajo no hay soportes importantes hasta los mínimos anuales en los 9.111 puntos. Así es el mercado, encadenamos diez sesiones de subidas consecutivas y a la mínima que nos descuidamos retrocedemos todo lo ganado en poco más de una semana. Lo cierto es que la tendencia bajista sigue ahí, intacta. Y lo único que nos puede hacer dudar acerca de que algo puede estar cambiando en nuestro Ibex pasa porque se supere la resistencia a la que tanto tiempo hemos hecho referencia. Y mientras tanto, a la espera de que el precio nos de más información de la que ahora mismo tenemos.